Scrutatio

Mercoledi, 1 maggio 2024 - San Giuseppe Lavoratore ( Letture di oggi)

Eclesiástico/Ben Sirá 21


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1Hijo, ¿has pecado? No lo vuelvas a hacer,
y pide perdón por tus pecados anteriores.
2Como de serpiente huye del pecado,
porque, si te acercas, te morderá.
Dientes de león son sus dientes,
que quitan la vida a los hombres.
3Como espada de dos filos es toda iniquidad,
para su herida no hay remedio.
4El terror y la violencia arrasan la riqueza,
así quedará arrasada la casa del orgulloso.
5La oración del pobre va de su boca a los oídos de Dios,
y el juicio divino no se deja esperar.
6El que odia la reprensión sigue las huellas del pecador,
el que teme al Señor se convierte en su corazón.
7De lejos se conoce al charlatán,
y el hombre reflexivo le adivina los deslices.
8Quien edifica su casa con dinero ajeno
es como el que amontona piedras para su tumba.
9Estopa hacinada es la reunión de los sin ley,
su meta es la llama de fuego.
10El camino de los pecadores está bien enlosado,
pero a su término está la fosa del seol.
11El que guarda la Ley controla sus ideas,
la meta del temor del Señor es la sabiduría.
12No alcanzará doctrina quien no es habilidoso,
pero no hay habilidades que llenan de amargura.
13La ciencia del sabio crecerá como una inundación,
y su consejo será fuente de vida.
14El interior del necio es como un vaso roto,
que no retiene ningún conocimiento.
15Si un hombre de saber oye palabra sabia,
la elogia y otra suya añade.
Si la oye el libertino, le desagrada
y la echa detrás de sus espaldas.
16El relato del necio es como fardo en el camino,
mas en los labios del inteligente se halla gracia.
17La boca del sensato es buscada en la asamblea,
sus palabras se meditan de corazón.
18Como casa en ruinas, así la sabiduría del necio,
el conocimiento del tonto, palabras incoherentes.
19Cadenas en los pies, es la educación para el mentecato,
como esposas en su mano derecha.
20El necio, cuando ríe, lo hace a carcajadas,
mas el hombre sensato apenas si sonríe.
21Adorno de oro es la educación para el sensato,
como un brazalete en su brazo derecho.
22El pie del necio entra rápido en la casa,
el hombre experimentado se presenta con modestia.
23Desde la puerta el insensato fisga el interior,
el hombre bien educado queda afuera.
24Es falta de educación escuchar a la puerta,
tal descortesía indigna al sensato.
25Los labios de los habladores repiten las palabras ajenas,
mas las palabras de los prudentes se pesan en balanza.
26En la boca de los necios está su corazón,
pero el corazón de los sabios es su boca.
27Cuando el impío maldice a Satanás,
a sí mismo se maldice.
28El murmurador mancha su propia alma,
y es detestado por el vecindario.