Salmos 18
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BIBLIA | BIBBIA MARTINI |
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1 Del maestro de coro. Del siervo de Yahveh, David, que dirigió a Yahveh las palabras de este cántico el día en que Yahveh le libró de todos sus enemigos y de las manos de Saúl. | 1 Salmo di David. I Cielli narrano la gloria di Dio, e le opere delle mani di lui annunzia il firmamento. |
2 Dijo: Yo te amo, Yahveh, mi fortaleza, (mi salvador, que de la violencia me has salvado). | 2 Il giorno al giorno fa noia questa parola, e la notte ne da cognizione alla notte. |
3 Yahveh, mi roca y mi baluarte, mi liberador, mi Dios; la peña en que me amparo, mi escudo y fuerza de mi salvación, mi ciudadela y mi refugio. | 3 Non havvi linguaggio, né favella, presso di cui intese non siano le loro voci. |
4 Invoco a Yahveh, que es digno de alabanza, y quedo a salvo de mis enemigos. | 4 Il loro suono si è diffuso per tutta quanta la terra, e le loro parole sino a' confini della terra. |
5 Las olas de la muerte me envolvían, me espantaban las trombas de Belial, | 5 Ha posto nel sole il suo padiglione, e questi come uno sposo, che esce dalla stanza nuziale, Spunta fuor qual gigante a fornir sua carriera: |
6 los lazos del seol me rodeaban, me aguardaban los cepos de la Muerte. | 6 Dall'una estremità del cielo si parte; E corre fino all'altra estremità di esso, e non havvi chi al calore di lui si nasconda. |
7 Clamé a Yahveh en mi angustia, a mi Dios invoqué; y escuchó mi voz desde su Templo, resonó mi llamada en sus oídos. | 7 La legge del Signore immacolata, che converte le anime: la testimonianza del Signore è fedele, e ai piccoli da saggezza. |
8 La tierra fue sacudida y vaciló, retemblaron las bases de los montes, (vacilaron bajo su furor); | 8 I precetti del Signore sono retti, e rallegrano i cuori: il comandamento del Signore è lucente, e gli occhi rischiara. |
9 una humareda subió de sus narices, y de su boca un fuego que abrasaba, (de él salían carbones encendidos). | 9 Santo il timor del Signore, che sussiste per tutti i secoli: i giudizj del Signore son verità, giusti in se stessi. |
10 El inclinó los cielos y bajó, un espeso nublado debajo de sus pies; | 10 Più desiderevoli che l'oro, e le pietre molto preziose, e dolci più del miele, e del favo di miele. |
11 cabalgó sobre un querube, emprendió el vuelo, sobre las alas de los vientos planeó. | 11 Imperocché il tuo servo diligentemente gli osserva, e grande è la mercede dell'osservarli. |
12 Se puso como tienda un cerco de tinieblas, tinieblas de las aguas, espesos nubarrones; | 12 Chi è che gli errori conosca? Mondami da' peccati, che a me sono occulti, |
13 del fulgor que le precedía se encendieron granizo y ascuas de fuego. | 13 E da' perversi uomini tienimi lontano. Se questi non prevarranno sopra di me, sarò allor senza macchia, e da delitto gravissimo sarò mondato. |
14 Tronó Yahveh en los cielos, lanzó el Altísimo su voz; | 14 E a te accette saranno le parole della mia bocca, e la meditazione del cuor mio alla tua presenza in ogni tempo, O Signore, aiuto mio, e mio Redentore. |
15 arrojó saetas, y los puso en fuga, rayos fulminó y sembró derrota. | |
16 El fondo del mar quedó a la vista, los cimientos del orbe aparecieron, ante tu imprecación, Yahveh, al resollar el aliento en tus narices. | |
17 El extiende su mano de lo alto para asirme, para sacarme de las profundas aguas; | |
18 me libera de un enemigo poderoso, de mis adversarios más fuertes que yo. | |
19 Me aguardaban el día de mi ruina, más Yahveh fue un apoyo para mí; | |
20 me sacó a espacio abierto, me salvó porque me amaba. | |
21 Yahveh me recompensa conforme a mi justicia, me paga conforme a la pureza de mis manos; | |
22 porque he guardado los caminos de Yahveh, y no he hecho el mal lejos de mi Dios. | |
23 Porque tengo ante mí todos sus juicios, y sus preceptos no aparto de mi lado; | |
24 he sido ante él irreprochable, y de incurrir en culpa me he guardado. | |
25 Y Yahveh me devuelve según mi justicia, según la pureza de mis manos que tiene ante sus ojos. | |
26 Con el piadoso eres piadoso, intachable con el hombre sin tacha; | |
27 con el puro eres puro, con el ladino, sagaz; | |
28 tú que salvas al pueblo humilde, y abates los ojos altaneros. | |
29 Tú eres, Yahveh, mi lámpara, mi Dios que alumbra mis tinieblas; | |
30 con tu ayuda las hordas acometo, con mi Dios escalo la muralla. | |
31 Dios es perfecto en sus caminos, la palabra de Yahveh acrisolada. El es el escudo de cuantos a él se acogen. | |
32 Pues ¿quién es Dios fuera de Yahveh? ¿Quién Roca, sino sólo nuestro Dios? | |
33 El Dios que me ciñe de fuerza, y hace mi camino irreprochable, | |
34 que hace mis pies como de ciervas, y en las alturas me sostiene en pie, | |
35 el que mis manos para el combate adiestra y mis brazos para tensar arco de bronce. | |
36 Tú me das tu escudo salvador, (tu diestra me sostiene), tu cuidado me exalta, | |
37 mis pasos ensanchas ante mí, no se tuercen mis tobillos. | |
38 Persigo a mis enemigos, les doy caza, no vuelvo hasta haberlos acabado; | |
39 los quebranto, no pueden levantarse, sucumben debajo de mis pies. | |
40 Para el combate de fuerza me ciñes, doblegas bajo mí a mis agresores, | |
41 a mis enemigos haces dar la espalda, extermino a los que me odian. | |
42 Claman, mas no hay salvador, a Yahveh, y no les responde. | |
43 Los machaco como polvo al viento, como al barro de las calles los piso. | |
44 De las querellas de mi pueblo tú me libras, me pones a la cabeza de las gentes; pueblos que no conocía me sirven; | |
45 los hijos de extranjeros me adulan, son todo oídos, me obedecen, | |
46 los hijos de extranjeros desmayan, y dejan temblando sus refugios. | |
47 ¡Viva Yahveh, bendita sea mi roca, el Dios de mi salvación sea ensalzado, | |
48 el Dios que la venganza me concede y abate los pueblos a mis plantas! | |
49 Tú me libras de mis enemigos, me exaltas sobre mis agresores, del hombre violento me salvas. | |
50 Por eso he de alabarte entre los pueblos, a tu nombre, Yahveh, salmodiaré. | |
51 El hace grandes las victorias de su rey y muestra su amor a su ungido, a David y a su linaje para siempre. |