Scrutatio

Domenica, 28 aprile 2024 - San Luigi Maria Grignion da Montfort ( Letture di oggi)

Vangelo secondo Marco 8


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BIBBIA CEI 2008EL LIBRO DEL PUEBLO DE DIOS
1 In quei giorni, poiché vi era di nuovo molta folla e non avevano da mangiare, chiamò a sé i discepoli e disse loro:1 En esos días, volvió a reunirse una gran multitud, y como no tenían qué comer, Jesús llamó a sus discípulos y les dijo:
2 «Sento compassione per la folla; ormai da tre giorni stanno con me e non hanno da mangiare.2 «Me da pena esta multitud, porque hace tres días que están conmigo y no tienen qué comer.
3 Se li rimando digiuni alle loro case, verranno meno lungo il cammino; e alcuni di loro sono venuti da lontano».3 Si los mando en ayunas a sus casas, van a desfallecer en el camino, y algunos han venido de lejos».
4 Gli risposero i suoi discepoli: «Come riuscire a sfamarli di pane qui, in un deserto?».4 Los discípulos le preguntaron: «¿Cómo se podría conseguir pan en este lugar desierto para darles de comer?».
5 Domandò loro: «Quanti pani avete?». Dissero: «Sette».5 el les dijo: «¿Cuántos panes tienen ustedes?». Ellos respondieron: «Siete».
6 Ordinò alla folla di sedersi per terra. Prese i sette pani, rese grazie, li spezzò e li dava ai suoi discepoli perché li distribuissero; ed essi li distribuirono alla folla.6 Entonces él ordenó a la multitud que se sentara en el suelo, después tomó los siete panes, dio gracias, los partió y los fue entregando a sus discípulos para que los distribuyeran. Ellos los repartieron entre la multitud.
7 Avevano anche pochi pesciolini; recitò la benedizione su di essi e fece distribuire anche quelli.7 Tenían, además, unos cuantos pescados pequeños, y después de pronunciar la bendición sobre ellos, mandó que también los repartieran.
8 Mangiarono a sazietà e portarono via i pezzi avanzati: sette sporte.8 Comieron hasta saciarse y todavía se recogieron siete canastas con lo que había sobrado.
9 Erano circa quattromila. E li congedò.9 Eran unas cuatro mil personas. Luego Jesús los despidió.
10 Poi salì sulla barca con i suoi discepoli e subito andò dalle parti di Dalmanutà.
10 En seguida subió a la barca con sus discípulos y fue a la región de Dalmanuta.
11 Vennero i farisei e si misero a discutere con lui, chiedendogli un segno dal cielo, per metterlo alla prova.11 Entonces llegaron los fariseos, que comenzaron a discutir con él; y, para ponerlo a prueba, le pedían un signo del cielo.
12 Ma egli sospirò profondamente e disse: «Perché questa generazione chiede un segno? In verità io vi dico: a questa generazione non sarà dato alcun segno».12 Jesús, suspirando profundamente, dijo: «¿Por qué esta generación pide un signo? Les aseguro que no se le dará ningún signo».
13 Li lasciò, risalì sulla barca e partì per l’altra riva.
13 Y dejándolos, volvió a embarcarse hacia la otra orilla.
14 Avevano dimenticato di prendere dei pani e non avevano con sé sulla barca che un solo pane.14 Los discípulos se habían olvidado de llevar pan y no tenían más que un pan en la barca.
15 Allora egli li ammoniva dicendo: «Fate attenzione, guardatevi dal lievito dei farisei e dal lievito di Erode!».15 Jesús les hacía esta recomendación: «Estén atentos, cuídense de la levadura de los fariseos y de la levadura de Herodes».
16 Ma quelli discutevano fra loro perché non avevano pane.16 Ellos discutían entre sí, porque no habían traído pan.
17 Si accorse di questo e disse loro: «Perché discutete che non avete pane? Non capite ancora e non comprendete? Avete il cuore indurito?17 Jesús se dio cuenta y les dijo: «¿A qué viene esa discusión porque no tienen pan? ¿Todavía no comprenden ni entienden? Ustedes tienen la mente enceguecida.
18 Avete occhi e non vedete, avete orecchi e non udite? E non vi ricordate,18 Tienen ojos y no ven, oídos y no oyen. ¿No recuerdan
19 quando ho spezzato i cinque pani per i cinquemila, quante ceste colme di pezzi avete portato via?». Gli dissero: «Dodici».19 cuántas canastas llenas de sobras recogieron, cuando repartí cinco panes entre cinco mil personas?». Ellos le respondieron: «Doce».
20 «E quando ho spezzato i sette pani per i quattromila, quante sporte piene di pezzi avete portato via?». Gli dissero: «Sette».20 «Y cuando repartí siete panes entre cuatro mil personas, ¿cuántas canastas llenas de trozos recogieron?». Ellos le respondieron: «Siete».
21 E disse loro: «Non comprendete ancora?».
21 Entonces Jesús les dijo: «¿Todavía no comprenden?».
22 Giunsero a Betsàida, e gli condussero un cieco, pregandolo di toccarlo.22 Cuando llegaron a Betsaida, le trajeron a un ciego y le rogaban que lo tocara.
23 Allora prese il cieco per mano, lo condusse fuori dal villaggio e, dopo avergli messo della saliva sugli occhi, gli impose le mani e gli chiese: «Vedi qualcosa?».23 El tomó al ciego de la mano y lo condujo a las afueras del pueblo. Después de ponerla saliva en los ojos e imponerle las manos, Jesús le preguntó: «¿Ves algo?».
24 Quello, alzando gli occhi, diceva: «Vedo la gente, perché vedo come degli alberi che camminano».24 El ciego, que comenzaba a ver, le respondió: «Veo hombres, como si fueran árboles que caminan».
25 Allora gli impose di nuovo le mani sugli occhi ed egli ci vide chiaramente, fu guarito e da lontano vedeva distintamente ogni cosa.25 Jesús le puso nuevamente las manos sobre los ojos, y el hombre recuperó la vista. Así quedó curado y veía todo con claridad.
26 E lo rimandò a casa sua dicendo: «Non entrare nemmeno nel villaggio».
26 Jesús lo mandó a su casa, diciéndole: «Ni siquiera entres en el pueblo».
27 Poi Gesù partì con i suoi discepoli verso i villaggi intorno a Cesarèa di Filippo, e per la strada interrogava i suoi discepoli dicendo: «La gente, chi dice che io sia?».27 Jesús salió con sus discípulos hacia los poblados de Cesarea de Filipo, y en el camino les preguntó: «¿Quién dice la gente que soy yo?.
28 Ed essi gli risposero: «Giovanni il Battista; altri dicono Elia e altri uno dei profeti».28 Ellos le respondieron: «Algunos dicen que eres Juan el Bautista; otros, Elías; y otros, alguno de los profetas».
29 Ed egli domandava loro: «Ma voi, chi dite che io sia?». Pietro gli rispose: «Tu sei il Cristo».29 «Y ustedes, ¿Tú eres el Mesías».
30 E ordinò loro severamente di non parlare di lui ad alcuno.
30 Jesús les ordenó terminantemente que no dijeran nada acerca de él.
31 E cominciò a insegnare loro che il Figlio dell’uomo doveva soffrire molto ed essere rifiutato dagli anziani, dai capi dei sacerdoti e dagli scribi, venire ucciso e, dopo tre giorni, risorgere.31 Y comenzó a enseñarles que el Hijo del hombre debía sufrir mucho y ser rechazado por los ancianos, los sumos sacerdotes y los escribas; que debía ser condenado a muerte y resucitar después de tres días;
32 Faceva questo discorso apertamente. Pietro lo prese in disparte e si mise a rimproverarlo.32 y les hablaba de esto con toda claridad. Pedro, llevándolo aparte, comenzó a reprenderlo.
33 Ma egli, voltatosi e guardando i suoi discepoli, rimproverò Pietro e disse: «Va’ dietro a me, Satana! Perché tu non pensi secondo Dio, ma secondo gli uomini».
33 Pero Jesús, dándose vuelta y mirando a sus discípulos, lo reprendió, diciendo: «¡Retírate, ve detrás de mí, Satanás! Porque tus pensamientos no son los de Dios, sino los de los hombres».
34 Convocata la folla insieme ai suoi discepoli, disse loro: «Se qualcuno vuol venire dietro a me, rinneghi se stesso, prenda la sua croce e mi segua.34 Entonces Jesús, llamando a la multitud, junto con sus discípulos, les dijo: «El que quiera venir detrás de mí, que renuncie a sí mismo, que cargue con su cruz y me siga.
35 Perché chi vuole salvare la propria vita, la perderà; ma chi perderà la propria vita per causa mia e del Vangelo, la salverà.35 Porque el que quiera salvar su vida, la perderá; y el que pierda su vida por mí y por la Buena Noticia, la salvará.
36 Infatti quale vantaggio c’è che un uomo guadagni il mondo intero e perda la propria vita?36 ¿De qué le servirá al hombre ganar el mundo entero, si pierde su vida?
37 Che cosa potrebbe dare un uomo in cambio della propria vita?37 ¿Y qué podrá dar el hombre a cambio de su vida?
38 Chi si vergognerà di me e delle mie parole davanti a questa generazione adultera e peccatrice, anche il Figlio dell’uomo si vergognerà di lui, quando verrà nella gloria del Padre suo con gli angeli santi».38 Porque si alguien se avergüenza de mí y de mis palabras en esta generación adúltera y pecadora, también el Hijo del hombre se avergonzará de él cuando venga en la gloria de su Padre con sus santos ángeles».