Scrutatio

Mercoledi, 8 maggio 2024 - Madonna del Rosario di Pompei ( Letture di oggi)

Salmos 59


font
BIBLIABIBBIA MARTINI
1 Del maestro de coro. «No destruyas». De David. A media
voz. Cuando Saúl mandó a vigilar su casa con el fin de
matarle.
1 Per quelli, che saranno cangiati. Iscrizione da mettersi sopra una colonna: allo stesso Davidde per istruzione: quando egli messe a fuoco, e fiamma la Mesopotamia della Siria, e Sobal, e tornato Gioab vinse l'Idumea con istrage di dodici mila uomini nella valle delle saline.
Tu ci rigettasti, o Dio, e ci distruggesti: ti sdegnasti, e avesti misericordia di noi.
2 ¡Líbrame de mis enemigos, oh Dios mío,
de mis agresores protégeme,
2 Scuotesti la terra, e là spaccasti: sana le piaghe di lei, perocché ella è scommossa.
3 líbrame de los agentes de mal,
de los hombres sanguinarios sálvame!
3 Dure cose facesti provare al tuo popolo: ci abbeverasti con vino di amarezza.
4 Mira que acechan a mi alma,
poderosos se conjuran contra mí;
sin rebeldía ni pecado en mí, Yahveh,
4 Tu che desti a color, che ti temevano un segno, perché dalla faccia dell'arco fuggissero;
5 sin culpa alguna, corren y se aprestan.
Despiértate, ven a mi encuentro y mira,
5 Affinchè fosser liberati i tuoi diletti; salvami colla tua destra, ed esaudiscimi.
6 tú, Yahveh, Dios Sebaot, Dios de Israel,
álzate a visitar a todos los gentiles,
no te apiades de ninguno de esos traidores pérfidos.
Pausa.
6 Ha parlato Dio pel suo Santo: mi consoleró, e spartirò la Samaria, e misurerò la valle dei tabernacoli.
7 Regresan a la tarde,
aúllan como perros,
rondan por la ciudad.
7 Mio è Galaad, e mio è Manasse, ed Efraim fortezza della mia testa.
8 Míralos desbarrar a boca llena,
espadas en sus labios:
«¿Hay alguno que oiga?»
8 Giuda mio re: Moab vaso di mia speranza. Col mio piede calcherò l'Idumea: gli stranieri a me saran soggetti.
9 Mas tú, Yahveh, te ríes de ellos,
tú te mofas de todos los gentiles.
9 Chi mi condurrà nella città munita? Chi mi condurrà fino nell'Idumea?
10 Oh fuerza mía, hacia ti miro.
Pues es Dios mi ciudadela,
10 Chi, se non tu, o Dio, il quale ci rigettasti? e non verrai tu, o Dio, co' nostri eserciti?
11 el Dios de mi amor viene a mi encuentro.
Dios me hará desafiar a los que me asechan.
11 Aiutaci tu nella tribolazione; perocché in vano si aspetta salute dall'uomo.
12 ¡Oh, no los mates, no se olvide mi pueblo,
dispérsalos con tu poder, humíllalos,
oh Señor, nuestro escudo!
12 Con Dio farem cose grandi; ed egli annichilerà coloro, che ci affliggono.
13 Pecado es en su boca la palabra de sus labios;
¡queden, pues, presos en su orgullo,
por la blasfemia, por la mentira que vocean!
14 ¡Suprime con furor, suprímelos, no existan más!
Y se sepa que Dios domina en Jacob,
hasta los confines de la tierra. Pausa.
15 Regresan a la tarde,
aúllan como perros,
rondan por la ciudad;
16 vedlos buscando qué comer,
hasta que no están hartos van gruñendo.
17 Yo, en cambio, cantaré tu fuerza,
aclamaré tu amor a la mañana;
pues tú has sido para mí una ciudadela,
un refugio en el día de mi angustia.
18 Oh fuerza mía, para ti salmodiaré,
pues es Dios mi ciudadela,
el Dios de mi amor.