Scrutatio

Domenica, 5 maggio 2024 - Beato Nunzio Sulprizio ( Letture di oggi)

Sabiduría 7


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BIBLIAEL LIBRO DEL PUEBLO DE DIOS
1 Yo también soy un hombre mortal como todos, un descendiente del primero que fue formado de la tierra. En el seno de una madre fui hecho carne;
1 Yo también soy un hombre mortal, igual que todos, nacido del primer hombre, que fue formado de la tierra: en el seno de una madre fue modelada mi carne;
2 durante diez meses fui modelado en su sangre, de una semilla de hombre y del placer que acompaña al sueño.
2 durante diez meses tomé consistencia en su sangre, gracias al semen paterno y al placer que va acompañado del sueño.
3 Yo también, una vez nacido, aspiré el aire común, caí en la tierra que a todos recibe por igual y mi primera voz fue la de todos: lloré.
3 Yo también, al nacer, respiré el aire común, caí sobre la tierra que nos recibe a todos por igual, y mi primer grito, como el de todos, fue el llanto.
4 Me crié entre pañales y cuidados.
4 Fui criado entre pañales y en medio de cuidados,
5 Pues no hay rey que haya tenido otro comienzo de su existencia;
5 porque ningún rey comenzó a vivir de otra manera:
6 una es la entrada en la vida para todos y una misma la salida.
6 la entrada en la vida es la misma para todos, y también es igual la salida.
7 Por eso pedí y se me concedió la prudencia; supliqué y me vino el espíritu de Sabiduría.
7 Por eso oré, y me fue dada la prudencia, supliqué, y descendió sobre mí el espíritu de la Sabiduría.
8 Y la preferí a cetros y tronos y en nada tuve a la riqueza en comparación de ella.
8 La preferí a los cetros y a los tronos, y tuve por nada las riquezas en comparación con ella.
9 Ni a la piedra más preciosa la equiparé, porque todo el oro a su lado es un puñado de arena y barro parece la plata en su presencia.
9 No la igualé a la piedra más preciosa, porque todo el oro, comparado con ella, es un poco de arena; y la plata, a su lado, será considerada como barro.
10 La amé más que la salud y la hermosura y preferí tenerla a ella más que a la luz, porque la claridad que de ella nace no conoce noche.
10 La amé más que a la salud y a la hermosura, y la quise más que a la luz del día, porque su resplandor no tiene ocaso.
11 Con ella me vinieron a la vez todos los bienes, y riquezas incalculables en sus manos.
11 Junto con ella me vinieron todos los bienes, y ella tenía en sus manos una riqueza incalculable.
12 Y yo me regocijé con todos estos bienes porque la Sabiduría los trae, aunque ignoraba que ella fuese su madre.
12 Yo gocé de todos esos bienes, porque la Sabiduría es la que los dirige, aunque ignoraba que ella era su madre.
13 Con sencillez la aprendí y sin envidia la comunico; no me guardo ocultas sus riquezas
13 La aprendí con sinceridad y la comunico sin envidia, y a nadie le oculto sus riquezas.
14 porque es para los hombres un tesoro inagotable y los que lo adquieren se granjean la amistad de Dios recomendados por los dones que les trae la instrucción.
14 Porque ella es para los hombres un tesoro inagotable: los que la adquieren se ganan la amistad de Dios, ya que son recomendados a él por los dones de la instrucción.
15 Concédame Dios hablar según él quiere y concebir pensamientos dignos de sus dones, porque él es quien guía a la Sabiduría y quien dirige a los sabios;
15 Que Dios me conceda hablar con inteligencia, y que mis pensamientos sean dignos de los dones recibidos, porque él mismo es el guía de la Sabiduría y el que dirige a los sabios.
16 que nosotros y nuestras palabras en sus manos estamos con toda nuestra prudencia y destreza en el obrar.
16 En sus manos estamos nosotros y nuestras palabras, y también todo el saber y la destreza para obrar.
17 Fue él quien me concedió un conocimiento verdadero de los seres, para conocer la estructura del mundo y la actividad de los elementos,
17 El me dio un conocimiento exacto de todo lo que existe, para comprender la estructura del mundo y la actividad de los elementos;
18 el principio, el fin y el medio de los tiempos, los cambios de los solsticios y la sucesión de las estaciones,
18 el comienzo, el fin y el medio de los tiempos, la alternancia de los solsticios y el cambio de las estaciones,
19 los ciclos del año y la posición de las estrellas,
19 los ciclos del año y las posiciones de los astros;
20 la naturaleza de los animales y los instintos de las fieras, el poder de los espíritus y los pensamientos de los hombres, las variedades de las plantas y las virtudes de las raíces.
20 la naturaleza de los animales y los instintos de las fieras, el poder de los espíritus y los pensamientos de los hombres; las variedades de las plantas y las propiedades de las raíces.
21 Cuanto está oculto y cuanto se ve, todo lo conocí, porque el artífice de todo, la Sabiduría, me lo enseñó.
21 Conocí todo lo que está oculto o manifiesto, porque me instruyó la Sabiduría, la artífice de todas las cosas.
22 Pues hay en ella un espíritu inteligente, santo, único, múltiple, sutil, ágil, perspicaz, inmaculado, claro, impasible, amante del bien, agudo,
22 En ella hay un espíritu inteligente, santo, único, multiforme, sutil, ágil, perspicaz, sin mancha, diáfano, inalterable, amante del bien, agudo,
23 incoercible, bienhechor, amigo del hombre, firme, seguro, sereno, que todo lo puede, todo lo observa, penetra todos los espíritus, los inteligentes, los puros, los más sutiles.
23 libre, bienhechor, amigo de los hombres, firme, seguro, sereno, que todo lo puede, lo observa todo y penetra en todos los espíritus: en los puros y hasta los más sutiles.
24 Porque a todo movimiento supera en movilidad la Sabiduría, todo lo atraviesa y penetra en virtud de su pureza.
24 La Sabiduría es más ágil que cualquier movimiento; a causa de su pureza, lo atraviesa y penetra todo.
25 Es un hálito del poder de Dios, una emanación pura de la gloria del Omnipotente, por lo que nada manchado llega a alcanzarla.
25 Ella es exhalación del poder de Dios, una emanación pura de la gloria del Todopoderoso: por eso, nada manchado puede alcanzarla.
26 Es un reflejo de la luz eterna, un espejo sin mancha de la actividad de Dios, una imagen de su bondad.
26 Ella es el resplandor de la luz eterna, un espejo sin mancha de la actividad de Dios y una imagen de su bondad.
27 Aun siendo sola, lo puede todo; sin salir de sí misma, renueva el universo; en todas las edades, entrando en las almas santas, forma en ellas amigos de Dios y profetas,
27 Aunque es una sola, lo puede todo; permaneciendo en sí misma, renueva el universo; de generación en generación, entra en las almas santas, para hacer amigos de Dios y profetas.
28 porque Dios no ama sino a quien vive con la Sabiduría.
28 Porque Dios ama únicamente a los que conviven con la Sabiduría.
29 Es ella, en efecto, más bella que el sol, supera a todas las constelaciones; comparada con la luz, sale vencedora,
29 Ella, en efecto, es más radiante que el sol y supera a todas las constelaciones; es más luminosa que la misma luz,
30 porque a la luz sucede la noche, pero contra la Sabiduría no prevalece la maldad.
30 Ya que la luz cede su lugar a la noche, pero contra la Sabiduría no prevalece el mal.