Scrutatio

Domenica, 28 aprile 2024 - San Luigi Maria Grignion da Montfort ( Letture di oggi)

Ad Corinthios II 3


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VULGATABIBLIA
1 Incipimus iterum nosmetipsos commendare ? aut numquid egemus (sicut quidam) commendatitiis epistolis ad vos, aut ex vobis ?1 ¿Comenzamos de nuevo a recomendarnos? ¿O es que, como algunos, necesitamos presentaros cartas de recomendación o pedíroslas?
2 Epistola nostra vos estis, scripta in cordibus nostris, quæ scitur, et legitur ab omnibus hominibus :2 Vosotros sois nuestra carta, escrita en nuestros corazones, conocida y leída por todos los hombres.
3 manifestati quod epistola estis Christi, ministrata a nobis, et scripta non atramento, sed Spiritu Dei vivi : non in tabulis lapideis, sed in tabulis cordis carnalibus.
3 Evidentemente sois una carta de Cristo, redactada por ministerio nuestro, escrita no con tinta, sino con el Espíritu de Dios vivo; no en tablas de piedra, sino en tablas de carne, en los corazones.
4 Fiduciam autem talem habemus per Christum ad Deum :4 Esta es la confianza que tenemos delante de Dios por Cristo.
5 non quod sufficientes simus cogitare aliquid a nobis, quasi ex nobis : sed sufficientia nostra ex Deo est :5 No que por nosotros mismos seamos capaces de atribuirnos cosa alguna, como propia nuestra, sino que nuestra capacidad viene de Dios,
6 qui et idoneos nos fecit ministros novi testamenti : non littera, sed Spiritu : littera enim occidit, Spiritus autem vivificat.6 el cual nos capacitó para ser ministros de una nueva Alianza, no de la letra, sino del Espíritu. Pues la letra mata mas el Espíritu da vida.
7 Quod si ministratio mortis litteris deformata in lapidibus fuit in gloria, ita ut non possent intendere filii Israël in faciem Moysi propter gloriam vultus ejus, quæ evacuatur :7 Que si el ministerio de la muerte, grabado con letras sobre tablas de piedra, resultó glorioso hasta el punto de no poder los hijos de Israel fijar su vista en el rostro de Moisés a causa de la gloria de su rostro, aunque pasajera,
8 quomodo non magis ministratio Spiritus erit in gloria ?8 ¡cuánto más glorioso no será el ministerio del Espíritu!
9 Nam si ministratio damnationis gloria est : multo magis abundat ministerium justitiæ in gloria.9 Efectivamente, si el ministerio de la condenación fue glorioso, con mucha más razón lo será el ministerio de la justicia.
10 Nam nec glorificatum est, quod claruit in hac parte, propter excellentem gloriam.10 Pues en este aspecto, no era gloria aquella glorificación en comparación de esta gloria sobreeminente.
11 Si enim quod evacuatur, per gloriam est : multo magis quod manet, in gloria est.
11 Porque si aquello, que era pasajero, fue glorioso, ¡cuánto más glorioso será lo permanente!
12 Habentes igitur talem spem, multa fiducia utimur :12 Teniendo, pues, esta esperanza, hablamos con toda valentía,
13 et non sicut Moyses ponebat velamen super faciem suam, ut non intenderent filii Israël in faciem ejus, quod evacuatur,13 y no como Moisés, que se ponía un velo sobre su rostro para impedir que los israelitas vieran el fin de lo que era pasajero...
14 sed obtusi sunt sensus eorum. Usque in hodiernum enim diem, idipsum velamen in lectione veteris testamenti manet non revelatum (quoniam in Christo evacuatur),14 Pero se embotaron sus inteligencias. En efecto, hasta el día de hoy perdura ese mismo velo en la lectura del Antiguo Testamento. El velo no se ha levantado, pues sólo en Cristo desaparece.
15 sed usque in hodiernum diem, cum legitur Moyses, velamen positum est super cor eorum.15 Hasta el día de hoy, siempre que se lee a Moisés, un velo está puesto sobre sus corazones.
16 Cum autem conversus fuerit ad Dominum, auferetur velamen.16 Y cuando se convierte al Señor, se arranca el velo.
17 Dominus autem Spiritus est : ubi autem Spiritus Domini, ibi libertas.17 Porque el Señor es el Espíritu, y donde está el Espíritu del Señor, allí está la libertad.
18 Nos vero omnes, revelata facie gloriam Domini speculantes, in eamdem imaginem transformamur a claritate in claritatem, tamquam a Domini Spiritu.18 Mas todos nosotros, que con el rostro descubierto reflejamos como en un espejo la gloria del Señor, nos vamos transformando en esa misma imagen cada vez más gloriosos: así es como actúa el Señor, que es Espíritu.