Scrutatio

Giovedi, 25 aprile 2024 - San Marco ( Letture di oggi)

Isaías 24


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1He aquí que Yahveh estraga la tierra, la despuebla, trastorna su superficie y dispersa a los habitantes de ella:2al pueblo como al sacerdote; al siervo como al señor; a la criada como a su señora; al que compra como al que vende; al que presta como al prestatario; al acreedor como a su deudor.3Devastada será la tierra y del todo saqueada, porque así ha hablado Yahveh.4En duelo se marchitó la tierra, se amustia, se marchita el orbe, el cielo con la tierra se marchita.5La tierra ha sido profanada bajo sus habitantes, pues traspasaron las leyes, violaron el precepto, rompieron la alianza eterna.6Por eso una maldición ha devorado la tierra, y tienen la culpa los que habitan en ella. Por eso han sido consumidos los habitantes de la tierra, y quedan pocos del linaje humano.7El mosto estaba triste, la viña mustia: se trocaron en suspiros todas las alegrías del corazón.8Cesó el alborozo de los tímpanos, suspendióse el estrépito de los alegres, cesó el alborozo del arpa.9No beben vino cantando: amarga el licor a sus bebedores.10Ha quedado la villa vacía, ha sido cerrada toda casa, y no se puede entrar.11Se lamentan en las calles por el vino. Desapareció toda alegría, emigró el alborozo de la tierra.12Ha quedado en la ciudad soledad, y de desolación está herida la puerta.13Porque en medio de la tierra, en mitad de los pueblos, pasa como en el vareo del olivo, como en los rebuscos cuando acaba la vendimia.14Ellos levantan su voz y lanzan hurras; la majestad de Yahveh aclaman desde el mar.15Por eso, en Oriente glorificad a Yahveh, en las islas del mar el nombre de Yahveh, Dios de Israel.16Desde el confín de la tierra cánticos hemos oído: «¡Gloria al justo!» Y digo: «¡Menguado de mí, menguado de mí! ¡Ay de mí, y de estos malvados que hacen maldad, los maldados que han consumado la maldad!»17¡Pánico, hoya y trampa contra ti, morador de la tierra!18Sucederá que el que escape del pánico, caerá en la hoya, y el que suba de la hoya, será preso en la trampa. Porque las esclusas de lo alto han sido abiertas, y se estremecen los cimientos de la tierra,19Estalla, estalla la tierra, se hace pedazos la tierra, sacudida se bambolea la tierra,20vacila, vacila la tierra como un beodo, se balancea como una cabaña; pesa sobre ella su rebeldía, cae, y no volverá a levantarse.21Aquel día castigará Yahveh al ejército de lo alto en lo alto y a los reyes de la tierra en la tierra;22serán amontonados en montón los prisioneros en el pozo, serán encerrados en la cárcel y al cabo de muchos días serán visitados.23Se afrentará la luna llena, se avergonzará el pleno sol, cuando reine Yahveh Sebaot en el monte Sión y en Jerusalén, y esté la Gloria en presencia de sus ancianos.