Scrutatio

Martedi, 28 maggio 2024 - Santi Emilio, Felice, Priamo e Feliciano ( Letture di oggi)

Salmos 102


font
EL LIBRO DEL PUEBLO DE DIOSBIBBIA VOLGARE
1 Oración del afligido que, en su angustia, derrama su llanto ante el Señor.

1 Salmo di David. O anima mia, benedici al Signore; ed etiam tutte le mie interiore benedicano al nome santo suo.
2 Señor, escucha mi oración

y llegue a ti mi clamor;

2 Benedici, o anima mia, al Signore; e non ti volere dimenticare le retribuzioni sue.
3 no me ocultes tu rostro

en el momento del peligro;

inclina hacia mí tu oído,

respóndeme pronto, cuando te invoco.

3 Egli ha misericordia di tutte le tue iniquità; egli sana tutte le tue infirmità.
4 Porque mis días se disipan como el humo,

y mis huesos arden como brasas;

4 Egli dalla morte ricompera la tua vita; egli corona te nelle miserazioni e misericordia.
5 mi corazón se seca, marchitado como la hierba,

¡y hasta me olvido de comer mi pan!

5 Egli riempie di beni il desio tuo; rinnovarassi come aquila la gioventù tua.
6 Los huesos se me pegan a la piel,

por la violencia de mis gemidos.

6 Faciente è il Signore misericordia, e giudicio a tutti la ingiuria sostinenti.
7 Me parezco a una lechuza del desierto,

soy como el búho entre las ruinas;

7 A Moisè manifestò le vie sue a' figliuoli d'Israel le volontà sue.
8 estoy desvelado, y me lamento

como un pájaro solitario en el tejado;

8 Il Signore miseratore è, e misericordioso; longanime, e molto misericordioso.
9 mis enemigos me insultan sin cesar,

y enfurecidos, me cubren de imprecaciones.

9 Non si adirarà in perpetuo; e in eterno non minaccerà.
10 Yo como ceniza en vez de pan

y mezclo mi bebida con lágrimas,

10 A noi non fece secondo li nostri peccati; nè ci retribuirà secondo le nostre iniquità.
11 a causa de tu indignación y tu furor,

porque me alzaste en alto y me arrojaste.

11 Però che secondo l'altezza del cielo alla terra, firmò la sua misericordia sopra coloro che il temono.
12 Mis días son como sombras que se agrandan,

y me voy secando como la hierba.

12 Quanto sta lontano il levante dal ponente, così da noi fece lontane le nostre iniquità.
13 Pero tú, Señor, reinas para siempre,

y tu Nombre permanece eternamente.

13 Come il padre ha misericordia de' figliuoli, così il Signore ha avuto misericordia de' suoi tementi;
14 Tú te levantarás, te compadecerás de Sión,

porque ya es hora de tenerle piedad,

ya ha llegado el momento señalado:

14 per che cognobbe la nostra fragile formazione. Si ricordò come siamo polvere;
15 tus servidores sienten amor por esas piedras

y se compadecen de esas ruinas.

15 così l'uomo, come fieno; e li suoi giorni come il fiore del campo caderanno.
16 Las naciones temerán tu Nombre, Señor,

y los reyes de la tierra se rendirán ante tu gloria:

16 Però che in quello passerà il spirito, e non starà; e più non conoscerà il luogo suo.
17 cuando el Señor reedifique a Sión

y aparezca glorioso en medio de ella;

17 Sopra di coloro che il temono, da eterno insino in eterno la misericordia del Signore. E la sua giustizia fia ne' figliuoli de' figliuoli,
18 cuando acepte la oración del desvalido

y no desprecie su plegaria.

18 a coloro che servano il testamento suo. E ricordansi de' suoi comandamenti, per fare quelli.
19 Quede esto escrito para el tiempo futuro

y un pueblo renovado alabe al Señor:

19 Il Signore ha apparecchiato in cielo la sedia sua; e il regno suo a tutti signorizzarà.
20 porque él se inclinó desde su alto Santuario

y miró a la tierra desde el cielo,

20 Tutti voi, santi suoi, benedicete al Signore, potenti in virtude, che fate l' ordine suo, per udire la voce de' suoi parlari.
21 para escuchar el lamento de los cautivos

y librar a los condenados a muerte.

21 Benedicete al Signore, tutte sue virtù; suoi ministri che fate la volontà [sua].
22 para proclamar en Sión el nombre del Señor

y su alabanza en Jerusalén,

22 Benedicete al Signore, tutte sue opere, in ogni luogo della signoria sua; e tu, anima mia, benedici al Signore.
23 cuando se reúnan los pueblos y los reinos,

y sirvan todos juntos al Señor.

24 Mis fuerzas se debilitaron por el camino

y se abreviaron mis días;

25 pero yo digo: «Dios mío,

no me lleves en la mitad de mi vida,

tú que permaneces para siempre».

26 En tiempos remotos, fundaste la tierra,

y el cielo es obra de tus manos;

27 ellos se acaban, y tú permaneces:

se desgastan lo mismo que la ropa,

los cambias como a un vestido, y ellos pasan.

28 Tú, en cambio, eres siempre el mismo,

y tus años no tienen fin.

29 Los hijos de tus servidores tendrán una morada

y su descendencia estará segura ante ti.