1 "Che hai, Ester? Io sono tuo fratello. Sta' di buon animo: non morrai! Il nostro ordine è solo per la gente comune. Avvicìnati". | 1 Al tercer día, Ester se puso sus vestiduras reales y llegó hasta el patio interior del palacio, frente a la sala del rey. El rey estaba sentado en su trono, en la sala real, frente a la puerta de entrada. |
2 Mentre parlava, ella venne meno. Il re si turbò e tutti i ministri cercavano di rianimarla. | 2 Al ver a la reina Ester, que estaba de pie en el patio, el rey la miró con benevolencia y extendió hacia ella el cetro de oro que tenía en la mano. Entonces Ester se acercó y tocó la punta del cetro. |
3 Il re le disse: "Che cosa c'è, regina Ester? Quale richiesta hai da farmi? Io ti darò fino alla metà del mio regno". | 3 El rey dijo a Ester: «¿Qué tienes, reina Ester? ¿Qué es lo que quieres? ¡Incluso la mitad de mi reino te será concedida!». |
4 Ester rispose: "Se sembrerà bene al re, venga il re e Aman, oggi, al banchetto che ho preparato per lui". | 4 Ester respondió: «Si al rey le parece bien, venga hoy con Amán al banquete que he preparado en su honor». |
5 Il re disse: "Affrettatevi a cercare Aman, per fare quello che ha detto Ester", e il re e Aman vennero al banchetto che aveva preparato Ester. | 5 Entonces el rey ordenó: «¡Avisen inmediatamente a Amán que acepte la invitación de Ester!». El rey fue con Amán al banquete preparado por Ester |
6 Mentre si beveva il vino, il re disse ad Ester: "Qual è la tua richiesta? Ti sarà concessa! Qual è il tuo desiderio? Fino alla metà del mio regno ti sarà concesso!". | 6 y, en el momento de brindar, le dijo: «¿Qué es lo que pides, Ester? Lo que sea, te será concedido. ¿Qué es lo que quieres? Aunque sea la mitad de mi reino, lo tendrás». |
7 Ester rispose e disse: "La mia domanda, la mia richiesta... | 7 Ester respondió: «¿Sabes cuál es mi petición y mi deseo? |
8 se ho trovato grazia agli occhi del re e se sembra bene al re di concedermi quanto domando e di eseguire la mia richiesta, venga il re e Aman anche domani al banchetto che io farò per essi, e io risponderò alla domanda del re". | 8 Si el rey me ha concedido su favor, y si a él le parece bien acceder a mi pedido y complacer mi deseo, que venga con Amán al banquete que les voy a preparar, y mañana responderé a la pregunta del rey». |
9 Aman quel giorno uscì tutto allegro e di buon umore, ma quando alla porta del re vide Mardocheo, che non si alzava e non si muoveva al suo passaggio, fu pieno di ira verso di lui. | 9 Amán había salido aquel día contento y de buen humor. Pero al ver en la puerta real a Mardoqueo, que no se levantaba ni temblaba ante él, se llenó de furor. |
10 Tuttavia Aman si dominò, andò a casa sua e fece chiamare i suoi fedeli e Zeres, sua moglie, | 10 Sin embargo, se contuvo y se fue a su casa. Luego mandó buscar a sus amigos y a Zeres, su mujer, |
11 parlò loro dello splendore della sua ricchezza, dei suoi numerosi figli e di come il re lo avesse promosso, elevandolo al di sopra dei prìncipi e dei ministri del re. | 11 y les estuvo hablando del esplendor de sus riquezas, de sus muchos hijos y de lo que el rey había hecho para engrandecerlo, elevándolo por encima de los demás ministros y servidores de la corte. |
12 Aggiunse ancora Aman: "La regina Ester non ha invitato che me al banchetto insieme con il re, e anche domani io sono invitato da lei con il re. | 12 Luego Amán añadió: «Además, la reina Ester preparó un banquete y me invitó a mí solo junto con el rey. Y también mañana seré su invitado en compañía del rey. |
13 Ma tutto questo mi è indifferente ogni volta che io vedo Mardocheo, l'ebreo che siede alla porta del re". | 13 Pero todo esto no significa nada para mí, mientras vea a ese judío Mardoqueo sentado en la puerta real». |
14 La moglie Zeres e i suoi fedeli gli dissero: "Si faccia un patibolo alto cinquanta cubiti e domattina parlane al re e vi si impicchi Mardocheo; va' poi contento al banchetto con il re". Piacque la cosa ad Aman e fu preparato il patibolo. | 14 Entonces Zeres, su mujer, y todos sus amigos le dijeron: «Que hagan levantar un patíbulo de veinticinco metros, y mañana por la mañana le dirás al rey que cuelguen allí a Mardoqueo. Así irás contento al banquete con el rey». La propuesta agradó a Amán e hizo levantar el patíbulo. |