SCRUTATIO

Domenica, 22 giugno 2025 - San Luigi Gonzaga ( Letture di oggi)

Eclesiástico/Ben Sirá 18


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BIBLIAEL LIBRO DEL PUEBLO DE DIOS
1 El que vive eternamente lo creó todo por igual,
1 El que vive para siempre creó todas las cosas por igual;
2 sólo el Señor será llamado justo.
2 sólo el Señor será hallado justo y no hay otro fuera de él.
3 El gobierna el mundo con la palma de la mano y todo obedece a su voluntad, ya que él, por su poder, es el Rey de todas las cosas y separa las sagradas de las profanas.
4 A nadie dio poder de proclamar sus obras,
pues ¿quién podrá rastrear sus maravillas?
4 A nadie le dio el poder de anunciar sus obras: ¿quién rastreará su grandeza?
5 El poder de su majestad, ¿quién lo calculará?
¿quién pretenderá contar sus misericordias?
5 ¿Quién podrá medir la magnitud de su fuerza y quién pretenderá narrar sus misericordias?
6 Nada hay que quitar, nada que añadir,
y no se pueden rastrear las maravillas del Señor.
6 No hay nada que quitar, nada que añadir, y es imposible rastrear las maravillas del Señor.
7 Cuando el hombre cree acabar, comienza entonces,
cuando se para, se queda perplejo.
7 Cuando el hombre llega al fin, está sólo al comienzo; cuando se detiene, no sale de su estupor.
8 ¿Qué es el hombre? ¿para qué sirve?
¿cuál es su bien y cuál su mal?
8 ¿Qué es el hombre? ¿Para qué sirve? ¿Cuál es su bien y cuál es su mal?
9 El número de los días del hombre
mucho será si llega a los cien años.
9 La vida de un hombre dura cien años a lo más:
10 Como gota de agua del mar, como grano de arena,
tan pocos son sus años frente a la eternidad.
10 como una gota del mar y como un grano de arena, son sus pocos años frente a la eternidad.
11 Por eso el Señor es paciente con ellos,
y derrama sobre ellos su misericordia.
11 Por eso el Señor es paciente con ellos y derrama sobre ellos su misericordia.
12 El ve y sabe que su fin es miserable,
por eso multiplica su perdón.
12 El ve y conoce qué miserable es su fin, y por eso multiplica su perdón.
13 La misericordia del hombre sólo alcanza a su prójimo,
la misericorida del Señor abarca a todo el mundo.
El reprende, adoctrina y enseña,
y hace volver, como un pastor, a su rebaño.
13 El hombre sólo tiene misericordia de su prójimo, pero el Señor es misericordioso con todos los vivientes. El reprende, corrige y enseña, y los hace volver como el pastor a su rebaño.
14 Tiene piedad de los que acogen la instrucción,
y de los que se afanan por sus juicios.
14 El tiene misericordia con los que aceptan la instrucción y está siempre dispuestos a cumplir sus decretos.
15 Hijo, con tus beneficios no mezcles el reproche
ni a tus regalos juntes palabras tristes.
15 Hijo mío, no eches en cara los beneficios que haces ni acompañes tus dones con palabras ofensivas.
16 ¿No aplaca el rocío el viento ardiente?
Así vale más la palabra que el regalo.
16 ¿No calma el rocío el calor ardiente? Así, una buena palabra puede más que un regalo.
17 ¿No ves que la palabra es más que un buen presente?
Pues el hombre dadivoso une los dos.
17 ¿Acaso no vale más una palabra que un obsequio? Pero el hombre caritativo sabe unir las dos cosas.
18 El necio aun sin dar hace afrenta,
quema los ojos el don del envidioso.
18 El necio reprende sin ningún miramiento y el don del avaro hace correr las lágrimas.
19 Antes de hablar infórmate,
cuídate antes de estar enfermo.
19 Antes de hablar, instrúyete, y cuídate antes de caer enfermo.
20 Antes de juzgar examínate a ti mismo,
y en el día de la visita encontrarás perdón.
20 Antes de juzgar, examínate a ti mismo, y hallarás perdón cuando el Señor te visite.
21 Antes de estar enfermo humíllate,
cuando peques muestra arrepentimiento.
21 Humíllate antes de caer enfermo y arrepiéntete apenas hayas pecado.
22 Nada te impida cumplir tu voto en el momento dado,
no aguardes hasta la muerte para justificarte.
22 Que nada te impida cumplir tus votos en el momento debido, y no esperes hasta la muerte para estar en regla.
23 Antes de hacer un voto prepárate;
no seas como el hombre que tienta al Señor.
23 Antes de hacer un voto, prepárate a cumplirlo, y no seas como un hombre que tienta al Señor.
24 Acuérdate de la ira de los últimos días,
y del momento del castigo, cuando Dios vuelva su
rostro.
24 Recuerda la ira de los últimos días y el tiempo del castigo, cuando el Señor apartará su rostro.
25 En tiempo de abundancia recuerda el tiempo de hambre,
la pobreza y la penuria en días de riqueza.
25 En tiempo de abundancia, recuerda el tiempo de hambre, y en los días de riqueza, la pobreza y la penuria.
26 De la mañana a la tarde corre el tiempo,
todo pasa presto delante del Señor.
26 De la mañana a la tarde, el tiempo cambia, y todo pasa rápidamente delante del Señor.
27 El hombre sabio es precavido en todo,
en la ocasión de pecar se anda con cuidado.
27 El hombre sabio está siempre alerta, y en la ocasión de pecado, se cuida para no faltar.
28 Todo hombre prudente conoce la sabiduría,
al que la encuentra le da su parabién.
28 Todo hombre prudente conoce la sabiduría y rinde homenaje al que la encuentra.
29 Los prudentes en palabras hacen sabiduría
y prodigan los proverbios acertados.
29 Los que hablan con sensatez son sabios ellos mismos y derraman como lluvia proverbios acertados
30 No vayas detrás de tus pasiones,
tus deseos refrena.
30 No te dejes guiar por tus pasiones, sino refrena tus deseos.
31 Si te consientes en todos los deseos,
te harás la irrisión de tus enemigos.
31 Si cedes a los impulsos de la pasión, ella hará de ti la irrisión de tus enemigos.
32 No te complazcas en la buena vida,
no te avengas a asociarte con ella.
32 Que tu alegría no consista en darte todos los gustos ni te endeudes para pagar lo que ellos cuestan.
33 No te empobrezcas festejando con dinero prestado,
cuando nada tienes en tu bolsa.
33 No te empobrezcas yendo de fiesta con dinero prestado, cuando no tienes nada en el bolsillo.