Scrutatio

Giovedi, 9 maggio 2024 - Beata Maria Teresa di Gesù (Carolina Gerhardinger) ( Letture di oggi)

Juan 11


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EL LIBRO DEL PUEBLO DE DIOSBIBBIA MARTINI
1 Había un hombre enfermo, Lázaro de Betania, del pueblo de María y de su hermana Marta.1 Era malato un tal Lazzaro del Borgo di Betania, patria di Maria, e di Marta sorelle.
2 María era la misma que derramó perfume sobre el Señor y le secó los pies con sus cabellos. Su hermano Lázaro era el que estaba enfermo.2 (Maria era quella, che unse con unguento il Signore, e asciugogli i piedi co' suoi capelli, il di cui fratello Lazzaro era malato).
3 Las hermanas enviaron a decir a Jesús: «Señor, el que tú amas, está enfermo».3 Mandarono dunque a dirgli le sorelle: Signore, ecco, che colui, che tu ami è malato.
4 Al oír esto, Jesús dijo: «Esta enfermedad no es mortal; es para gloria de Dios, para que el Hijo de Dios sea glorificado por ella».4 Udito questo, disse Gesù: Questa malattia non è per morte, ma per glorie di Dio, affinchè quindi sia glorificato il Figliuolo di Dio.
5 Jesús quería mucho a Marta, a su hermana y a Lázaro.5 Voleva bene Gesù a Marta, e Maria sua sorella, e a Lazzaro.
6 Sin embargo, cuando oyó que este se encontraba enfermo, se quedó dos días más en el lugar donde estaba.6 Sentito adunque che ebbe, come questi era malato, si fermò allora due dì nello stesso luogo.
7 Después dijo a sus discípulos: «Volvamos a Judea».7 Dopo di che disse a' discepoli: Andiam di nuovo nella Giudea.
8 Los discípulos le dijeron: «Maestro, hace poco los judíos querían apedrearte, ¿quieres volver allá?».8 Gli dissero i discepoli: Maestro, or ora cercavano i Giudei di lapidarti, di nuovo torni in là?
9 Jesús les respondió: «¿Acaso no son doce la horas del día? El que camina de día no tropieza, porque ve la luz de este mundo;9 Rispose Gesù: Non sono elleno dodici le ore del giorno? Quand'uno cammina di giorno, non inciampa, perché vede la luce di questo mondo:
10 en cambio, el que camina de noche tropieza, porque la luz no está en él».10 Quando poi uno cammina di notte, inciampa, perché non ha lume.
11 Después agregó: «Nuestro amigo Lázaro duerme, pero yo voy a despertarlo».11 Così parlò, e dopo di questo, disse loro: Il nostro amico Lazzaro dorme, ma vo a svegliarlo dal sonno.
12 Sus discípulos le dijeron: «Señor, si duerme, se curará».12 Dissero perciò i suoi discepoli: Signore, se dorme, sarà in salvo.
13 Ellos pensaban que hablaba del sueño, pero Jesús se refería a la muerte.13 Ma Gesù aveva parlato della di lui morte: ed essi avevan creduto, che parlasse del dormire di uno, che ha sonno.
14 Entonces les dijo abiertamente: «Lázaro ha muerto,14 Allora però disse loro chiaramente Gesù: Lazzaro è morto.
15 y me alegro por ustedes de no haber estado allí, a fin de que crean. Vayamos a verlo».15 E ho piacere per ragione di voi di non essere stato là, affinchè crediate: ma andiamo a lui.
16 Tomás, llamado el Mellizo, dijo a los otros discípulos: «Vayamos también nosotros a morir con él».16 Disse adunque Tommaso, soprannominato Didimo, ai condiscepoli: Andiamo anche noi, e muoiamo con lui.
17 Cuando Jesús llegó, se encontró con que Lázaro estaba sepultado desde hacía cuatro Días.17 Arrivato Gesù, trovollo già da quattro giorni sepolto.
18 Betania distaba de Jerusalén sólo unos tres kilómetros.18 (Era Betania circa quindici stadj vicina a Gerusalemme).
19 Muchos judíos habían ido a consolar a Marta y a María, por la muerte de su hermano.19 E molti Giudei erano venuti da Marta, e Maria per consolarle riguardo; il loro fratello.
20 Al enterarse de que Jesús llegaba, Marta salió a su encuentro, mientras María permanecía en la casa.20 Marta però, subito che ebbe sentito, che veniva Gesù, andogli incontro: e Maria stava sedendo in casa.
21 Marta dio a Jesús: «Señor, si hubieras estado aquí, mi hermano no habría muerto.21 Disse adunque Marta a Gesù: Signore, se eri qui, non moriva mio fratello.
22 Pero yo sé que aun ahora, Dios te concederá todo lo que le pidas».22 Ma anche adesso so, che qualunque cosa chiederai a Dio, Dio te la concederà.
23 Jesús le dijo: «Tu hermano resucitará».23 Dissele Gesù: Tuo fratello risorgerà.
24 Marta le respondió: «Sé que resucitará en la resurrección del último día».24 Risposegli Marta: So, che risorgerà nella risurrezione in quell'ultimo giorno.
25 Jesús le dijo: «Yo soy la Resurrección y la Vida. El que cree en mí, aunque muera, vivirá:25 Dissele Gesù: Io sono la risurrezione, e la vita: chi in me crede, sebben sia morto, viverà.
26 y todo el que vive y cree en mí, no morirá jamás. ¿Crees esto?».26 E chiunque vive, e crede in me, non morrà in eterno. Credi tu questo?
27 Ella le respondió: «Sí, Señor, creo que tú eres el Mesías, el Hijo de Dios, el que debía venir al mundo».27 Risposegli: Si, o Signore, io ho creduto, che tu se' il Cristo, il Figliuolo di Dio vivo, che se' venuto in questo mondo.
28 Después fue a llamar a María, su hermana, y le dijo en voz baja: «El Maestro está aquí y te llama».28 E detto questo, andò, e chiamò ci nascosto Maria sua sorella, dicendole: E qui il Maestro, e ti chiama.
29 Al oír esto, ella se levantó rápidamente y fue a su encuentro.29 Ella appena udito questo, alzossi in fretta, e andò da lui:
30 Jesús no había llegado todavía al pueblo, sino que estaba en el mismo sitio donde Marta lo había encontrado.30 Imperocché non era per anco Gesù entrato nel borgo: ma era tuttavia in quel luogo, dove Marta era andata ad incontrarlo.
31 Los Judíos que estaban en la casa consolando a María, al ver que esta se levantaba de repente y salía, la siguieron, pensando que iba al sepulcro para llorar allí.31 I Giudei perciò, che erano in casa con essa, e la racconsolavano, veduto avendo Maria alzarsi in fretta, e uscir fuori, la seguitarono, dicendo: Ella va al sepolcro per ivi piangere.
32 María llegó adonde estaba Jesús y, al verlo, se postró a sus pies y le dijo: «Señor, si hubieras estado aquí, mi hermano no habría muerto».32 Maria però, arrivata che fu, dove era Gesù, e vedutolo, gittossi a' suoi piedi, e disselli: Signore, se eri qui, non moriva mio fratello.
33 Jesús, al verla llorar a ella, y también a los judíos que la acompañaban, conmovido y turbado,33 Gesù allora vedendo lei piagnente, e piagnenti i Giudei, che eran venuti con essa, fremè interiormente, e turbò se tesso,
34 preguntó: «¿Dónde lo pusieron?». Le respondieron: «Ven, Señor, y lo verás».34 E disse: Dove l'avete messo? Gli risposero: Signore, vieni, e vedi.
35 Y Jesús lloró.35 E a Gesù venner le lagrime.
36 Los judíos dijeron: «¡Cómo lo amaba!».36 Disser perciò i Giudei: Vedete, com'ei lo amava.
37 Pero algunos decían: «Este que abrió los ojos del ciego de nacimiento, ¿no podría impedir que Lázaro muriera?».37 Ma taluni di essi dissero: E non poteva costui, che apri gli occhi al cieco nato, fare ancora, che questi non morisse?
38 Jesús, conmoviéndose nuevamente, llegó al sepulcro, que era una cueva con una piedra encima,38 Ma Gesù di nuovo fremendo interiormente, arrivò al sepolcro, che era una caverna, alla quale era stata soprapposta una lapida.
39 y le dijo: «Quiten la piedra». Marta, la hermana del difunto, le respondió: «Señor, huele mal; ya hace cuatro días que está muerto».39 Disse Gesù: Togliete via la lapida. Dissegli Marta, sorella del defunto: Signore, ci puzza già, perché è di quattro giorni.
40 Jesús le dijo: «¿No te he dicho que si crees, verás la gloria de Dios?».40 Risposele Gesù: Non ti ho io detto, che se crederai, vedrai la gloria di Dio?
41 Entonces quitaron la piedra, y Jesús, levantando los ojos al cielo, dijo: «Padre, te doy gracias porque me oíste.41 Levaron dunque la pietra: e Gesù alzò in alto gli occhi, e disse: Padre, rendo a te grazie, perché mi hai esaudito.
42 Yo sé que siempre me oyes, pero le he dicho por esta gente que me rodea, para que crean que tú me has enviado».42 Io però sapeva, che sempre mi esaudisci, ma l'ho detto per causa del popolo, che sta intorno: affinchè credano, che tu mi hai mandato.
43 Después de decir esto, gritó con voz fuerte: «¡Lázaro, ven afuera!».43 E detto questo, con voce sonora gridò: Lazzaro, vien fuora.
44 El muerto salió con los pies y las manos atados con vendas, y el rostro envuelto en un sudario. Jesús les dijo: «Desátenlo para que pueda caminar».44 E usci subito fuora il morto, legati con fasce i piedi, e le mani, e coperto il volto con un sudario. E Gesù disse loro: Scioglietelo, e lasciatelo andare.
45 Al ver lo que hizo Jesús, muchos de los judíos que habían ido a casa de María creyeron en él.45 Molti perciò di que' Giudei, che erano accorsi da Maria, e da Marta, e avevano veduto quello, che Gesù fatto aveva, credettero in lui.
46 Pero otros fueron a ver a los fariseos y les contaron lo que Jesús había hecho.46 Ma alcuni di essi andarono dai Farisei, e gli raccontarono quel, che aveva fatto Gesù.
47 Los sumos sacerdotes y los fariseos convocaron un Consejo y dijeron: «¿Qué hacemos? Porque este hombre realiza muchos signos.47 Radunarono perciò i Pontefici, e i Farisei il consiglio, e dicevano: Che facciam noi? quest' uomo fa molti miracoli.
48 Si lo dejamos seguir así, todos creerán en él, y los romanos vendrán y destruirán nuestro Lugar santo y nuestra nación».48 Se lo lasciam fare così, tutti crederanno in lui: e verranno i Romani, e stermineranno il nostre paese, e la nazione.
49 Uno de ellos, llamado Caifás, que era Sumo Sacerdote ese año, les dijo: «Ustedes no comprenden nada.49 Ma uno di essi, per nome Caifa, che era in quell'anno Pontefice, disse loro: Voi non sapete nulla,
50 ¿No les parece preferible que un solo hombre muera por el pueblo y no que perezca la nación entera?».50 Né riflettete, che torna conto a noi, che un uomo muoia pel popolo, e la nazione tutta non perisca.
51 No dijo eso por sí mismo, sino que profetizó como Sumo Sacerdote que Jesús iba a morir por la nación,51 E questo non lo disse egli di suo capo: ma essendo Pontefice di quell'anno profetò, che Gesù era per morire per la nazione.
52 y no solamente por la nación, sino también para congregar en la unidad a los hijos de Dios que estaban dispersos.52 E non solo per la nazione, ma ancora per raunare insieme i figliuoli di Dio, che eran dispersi.
53 A partir de ese día, resolvieron que debían matar a Jesús.53 Quindi è, che da quel giorno pensarono a dargli morte.
54 Por eso él no se mostraba más en público entre los judíos, sino que fue a una región próxima al desierto, a una ciudad llamada Efraím, y allí permaneció con sus discípulos.54 Gesù adunque non più conversava in pubblico tra' Giudei, ma andò in una regione vicina al deserto, in una città chiamata Efrem, e quivi si stava co' suoi discepoli.
55 Como se acercaba la Pascua de los judíos, mucha gente de la región había subido a Jerusalén para purificarse.55 Ed era vicina la Pasqua de' Giudei, e molti di quel paese andarono a Gerusalemme prima della Pasqua per parificarsi.
56 Buscaban a Jesús y se decían unos a otros en el Templo: «¿Qué les parece, vendrá a la fiesta o no?».56 Cercavano pertanto di Gesù, e dicevano tra loro, stando nel Tempio: Che ve ne pare del non esser lui venuto alla festa? E i Pontefici, e i Farisei avevano mandato un ordine, che chi sapesse, dove egli si fosse, ne desse avviso, affine di averlo nelle mani.
57 Los sumos sacerdotes y los fariseos habían dado orden de que si alguno conocía el lugar donde él se encontraba, lo hiciera saber para detenerlo.