Scrutatio

Domenica, 19 maggio 2024 - San Celestino V - Pietro di Morrone ( Letture di oggi)

Judit 6


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BIBLIAEL LIBRO DEL PUEBLO DE DIOS
1 Calmado el tumulto provocado por los hombres que estaban en torno al Consejo. Holofernes, jefe supremo del ejército de Asiria, dijo a Ajior delante de todos los pueblos extranjeros y de los moabitas:1 Cuando se apaciguó el tumulto de los que rodeaban al Consejo, Holofernes, general en jefe de las fuerzas asirias, increpó a Ajior en presencia de la multitud de extranjeros y de todos los moabitas, diciéndole:
2 «¿Quién eres tú, Ajior, y quiénes los mercenarios de Ammón, que te permites hoy lanzar profecías entre nosotros y nos aconsejas que no luchemos contra esta ralea de Israel, porque su Dios los cubrirá con su escudo? ¿Qué otro dios hay fuera de Nabucodonosor? Este enviará su fuerza y los aniquilará de sobre la faz de la tierra, sin que su Dios pueda librarlos.2 «¿Quién eres tú, Ajior, y ustedes, vendidos a Efraím, para que vengan a profetizar entre nosotros como lo has hecho hoy? ¿Por qué quieres disuadirnos de hacer la guerra a la estirpe de Israel, pretextando que su Dios los protege? ¿Acaso hay otro dios fuera de Nabucodonosor? El enviará su fuerza y los exterminará de la superficie de la tierra sin que su Dios pueda librarlos.
3 Nosotros, sus siervos, los batiremos como si fueran sólo un hombre,3 Nosotros, sus servidores, los aplastaremos como a un solo hombre, y no podrán resistir el empuje de nuestra caballería.
4 y no podrán resistir el empuje de nuestros caballos. Los pasaremos a fuego sin distinción. Sus montes se embriagarán de su sangre y sus llanuras se colmarán con sus cadáveres. No podrán mantenerse a pie firme ante nosotros y serán totalmente destruidos, dice el rey Nabucodonosor, Señor de toda la tierra. Porque lo ha dicho y no quedarán sin cumplimiento sus palabras.4 Los pasaremos a sangre y fuego; sus montañas quedarán empapadas con su sangre y sus llanuras se llenarán con sus cadáveres. No lograrán resistir ante nosotros, sino que serán completamente aniquilados, dice el rey Nabucodonosor, dueño de toda la tierra. Porque él ha hablado y sus palabras no caerán en el vacío.
5 Cuanto a ti, Ajior, mercenario ammonita, que has dicho estas palabras el día de tu iniquidad, a partir de ahora no verás ya mi rostro hasta el día en que tome venganza de esa ralea venida de Egipto.5 Y tú, Ajior, mercenario amonita, que has pronunciado estas palabras en un momento de desvarío, no verás más mi rostro hasta que me haya vengado de esa raza escapada de Egipto.
6 Entonces, el hierro de mis soldados y la lanza de mis servidores te atravesará los costados y caerás junto a sus heridos, cuando yo me revuelva contra ellos.6 Entonces serás atravesado por la espada de mi ejército y por la lanza de mis guerreros, y caerás entre sus heridos cuando yo vuelva del combate.
7 Mis servidores te van a llevar a la montaña y te van a dejar en una de las ciudades que están en las subidas.7 Mis servidores te llevarán a la montaña y te dejarán en una de las ciudades de los desfiladeros,
8 No perecerás sino cuando seas aniquilado justo con ellos.8 porque no morirás hasta que seas exterminado con esa gente.
9 Y no muestres un rostro tan abatido ya que en tu corazón esperas que no serán conquistados. Así lo digo y no dejará de cumplirse ni una sola de mis palabras».9 Y si abrigas la secreta esperanza de que no serán capturados, ¡no agaches la cabeza! Yo lo he dicho, y ninguna de mis palabras dejará de cumplirse».
10 Holofernes ordenó a los servidores que estaban al servicio de su tienda que tomasen a Ajior, lo llevasen a Betulia y lo entregasen en manos de los israelitas.10 Luego Holofernes ordenó a los servidores que estaban en su tienda de campaña que tomaran a Ajior, lo llevaran a Betulia y lo entregaran a los israelitas.
11 Los servidores le agarraron y le condujeron fuera del campamento, a la llanura; y de la llanura abierta pasaron a la región montañosa, alcanzando las fuentes que había al pie de Betulia.11 Ellos lo condujeron a la llanura, fuera del campamento, y después de atravesar la llanura en dirección a la montaña, llegaron junto a las fuentes que están debajo de Betulia.
12 Cuando los hombres de la ciudad los divisaron desde la cumbre del monte, corrieron a las armas y salieron fuera de la ciudad, a la cumbre del monte, mientras los honderos dominaban la subida y disparaban sus piedras contra ellos.12 Apenas los divisaron los hombres de la ciudad que estaban en la cumbre de la montaña empuñaron sus armas y salieron fuera de la ciudad, mientras los honderos arrojaban piedras para impedirles el acceso.
13 Entonces los asirios se deslizaron al pie del monte, ataron a Ajior, lo dejaron tendido en la falda y se volvieron donde su señor.13 Ellos, deslizándose por la ladera de la montaña, ataron a Ajior y lo dejaron tendido al pie de la misma. Luego volvieron a presentarse ante su señor.
14 Los israelitas bajaron de su ciudad, se acercaron y desatándole le llevaron a Betulia y le presentaron a los jefes de la ciudad,14 En seguida los israelitas bajaron de su ciudad, se acercaron a él y lo desataron. Luego lo condujeron a Betulia y lo presentaron a los jefes de la ciudad,
15 que en aquel tiempo eran Ozías, hijo de Miqueas, de la tribu de Simeón, Jabrís, hijo de Gotoniel, y Jarmís, hijo de Melkiel.15 que en aquellos días eran Ozías, hijo de Miqueas, de la tribu de Simeón, Cabris, hijo de Gotoniel, y Carmis, hijo de Melquiel.
16 Estos mandaron convocar a todos los ancianos de la ciudad. Se unieron también a la asamblea todos lo jóvenes y las mujeres; pusieron a Ajior en medio de todo el pueblo y Ozías le interrogó acerca de los sucedido.16 Ellos convocaron a todos los ancianos de la ciudad, y también concurrieron a la asamblea los jóvenes y las mujeres. Pusieron a Ajior en medio de todo el pueblo y Ozías lo interrogó acerca de lo sucedido.
17 Ajior respondió narrándoles las deliberaciones habidas en el Consejo de Holofernes, todas las cosas que él mismo había dicho delante de todos los jefes de los asirios y las bravatas que Holofernes había proferido contra la casa de Israel.17 El les refirió las deliberaciones del Consejo de Holofernes, lo que él mismo había dicho ante los jefes asirios, y las orgullosas amenazas de Holofernes contra el pueblo de Israel.
18 Entonces el pueblo se postró, adoró a Dios y clamó:18 Todo el pueblo, postrándose, adoró a Dios y Exclamó:
19 «Señor, Dios del cielo, mira su soberbia, compadécete de la humillación de nuestra raza y mira con piedad el rostro de los que te están consagrados».19 ¡Señor, Dios del cielo!, mira su arrogancia y compadécete de la humillación de nuestra raza: vuelve en este día tu mirada a los que te están consagrados».
20 Después dieron ánimos a Ajior y le felicitaron calurosamente,20 Luego tranquilizaron a Ajior y lo felicitaron efusivamente.
21 y a la salida de la asamblea, Ozías le condujo a su propia casa y ofreció un banquete a los ancianos. Y estuvieron invocando la ayuda del Dios de Israel durante toda la noche.21 Al terminar la asamblea, Ozías lo llevó a su casa y ofreció un banquete a los ancianos. Y durante toda aquella noche, imploraron la ayuda del Dios de Israel.