Scrutatio

Lunedi, 13 maggio 2024 - Beata Vergine Maria di Fatima ( Letture di oggi)

Mateo 26


font
EL LIBRO DEL PUEBLO DE DIOSBIBBIA CEI 2008
1 Cuando Jesús terminó de decir todas estas palabras, dijo a sus discípulos:1 Terminati tutti questi discorsi, Gesù disse ai suoi discepoli:
2 «Ya saben que dentro de dos días se celebrará la Pascua, y el Hijo del hombre será entregado para ser crucificado».2 «Voi sapete che fra due giorni è la Pasqua e il Figlio dell’uomo sarà consegnato per essere crocifisso».
3 Entonces los sumos sacerdotes y los ancianos del pueblo se reunieron en el palacio del Sumo Sacerdote, llamado Caifás,3 Allora i capi dei sacerdoti e gli anziani del popolo si riunirono nel palazzo del sommo sacerdote, che si chiamava Caifa,
4 y se pusieron de acuerdo para detener a Jesús con astucia y darle muerte.4 e tennero consiglio per catturare Gesù con un inganno e farlo morire.
5 Pero decían: «No lo hagamos durante la fiesta, para que no se produzca un tumulto en el pueblo».5 Dicevano però: «Non durante la festa, perché non avvenga una rivolta fra il popolo».
6 Cuando Jesús se encontraba en Betania, en casa de Simón el leproso,6 Mentre Gesù si trovava a Betània, in casa di Simone il lebbroso,
7 se acercó una mujer con un frasco de alabastro, que contenía un perfume valioso, y lo derramó sobre su cabeza, mientras él estaba comiendo.7 gli si avvicinò una donna che aveva un vaso di alabastro, pieno di profumo molto prezioso, e glielo versò sul capo mentre egli stava a tavola.
8 Al ver esto, sus discípulos, indignados, dijeron: «¿Para qué este derroche?8 I discepoli, vedendo ciò, si sdegnarono e dissero: «Perché questo spreco?
9 Se hubiera podido vender el perfume a buen precio para repartir el dinero entre los pobres».9 Si poteva venderlo per molto denaro e darlo ai poveri!».
10 Jesús se dio cuenta y les dijo: «¿Por qué molestan a esta mujer? Ha hecho una buena obra conmigo.10 Ma Gesù se ne accorse e disse loro: «Perché infastidite questa donna? Ella ha compiuto un’azione buona verso di me.
11 A los pobres los tendrán siempre con ustedes, pero a mí no me tendrán siempre.11 I poveri infatti li avete sempre con voi, ma non sempre avete me.
12 Al derramar este perfume sobre mi cuerpo, ella preparó mi sepultura.12 Versando questo profumo sul mio corpo, lei lo ha fatto in vista della mia sepoltura.
13 Les aseguro que allí donde se proclame esta Buena Noticia, en todo el mundo, se contará también en su memoria lo que ella hizo».13 In verità io vi dico: dovunque sarà annunciato questo Vangelo, nel mondo intero, in ricordo di lei si dirà anche ciò che ella ha fatto».
14 Entonces uno de los Doce, llamado Judas Iscariote, fue a ver a los sumos sacerdotes14 Allora uno dei Dodici, chiamato Giuda Iscariota, andò dai capi dei sacerdoti
15 y les dijo: «¿Cuánto me darán si se lo entrego?». Y resolvieron darle treinta monedas de plata.15 e disse: «Quanto volete darmi perché io ve lo consegni?». E quelli gli fissarono trenta monete d’argento.
16 Desde ese momento, Judas buscaba una ocasión favorable para entregarlo.16 Da quel momento cercava l’occasione propizia per consegnarlo.
17 El primer día de los Acimos, los discípulos fueron a preguntar a Jesús: «¿Dónde quieres que te preparemos la comida pascual?».17 Il primo giorno degli Azzimi, i discepoli si avvicinarono a Gesù e gli dissero: «Dove vuoi che prepariamo per te, perché tu possa mangiare la Pasqua?».
18 El respondió: «Vayan a la ciudad, a la casa de tal persona, y díganle: «El Maestro dice: Se acerca mi hora, voy a celebrar la Pascua en tu casa con mis discípulos».18 Ed egli rispose: «Andate in città da un tale e ditegli: “Il Maestro dice: Il mio tempo è vicino; farò la Pasqua da te con i miei discepoli”».
19 Ellos hicieron como Jesús les había ordenado y prepararon la Pascua.19 I discepoli fecero come aveva loro ordinato Gesù, e prepararono la Pasqua.
20 Al atardecer, estaba a la mesa con los Doce20 Venuta la sera, si mise a tavola con i Dodici.
21 y, mientras comían, Jesús les dijo: «Les aseguro que uno de ustedes me entregará».21 Mentre mangiavano, disse: «In verità io vi dico: uno di voi mi tradirà».
22 Profundamente apenados, ellos empezaron a preguntarle uno por uno: «¿Seré yo, Señor?».22 Ed essi, profondamente rattristati, cominciarono ciascuno a domandargli: «Sono forse io, Signore?».
23 El respondió: «El que acaba de servirse de la misma fuente que yo, ese me va a entregar.23 Ed egli rispose: «Colui che ha messo con me la mano nel piatto, è quello che mi tradirà.
24 El Hijo del hombre se va, como está escrito de él, pero ¡ay de aquel por quien el Hijo del hombre será entregado: más le valdría no haber nacido!».24 Il Figlio dell’uomo se ne va, come sta scritto di lui; ma guai a quell’uomo dal quale il Figlio dell’uomo viene tradito! Meglio per quell’uomo se non fosse mai nato!».
25 Judas, el que lo iba a entregar, le preguntó: «¿Seré yo, Maestro?». «Tú lo has dicho», le respondió Jesús.25 Giuda, il traditore, disse: «Rabbì, sono forse io?». Gli rispose: «Tu l’hai detto».
26 Mientras comían, Jesús tomó el pan, pronunció la bendición, lo partió y lo dio a sus discípulos, diciendo: «Tomen y coman, esto es mi Cuerpo».26 Ora, mentre mangiavano, Gesù prese il pane, recitò la benedizione, lo spezzò e, mentre lo dava ai discepoli, disse: «Prendete, mangiate: questo è il mio corpo».
27 Después tomó una copa, dio gracias y se la entregó, diciendo: «Beban todos de ella,27 Poi prese il calice, rese grazie e lo diede loro, dicendo: «Bevetene tutti,
28 porque esta es mi Sangre, la Sangre de la Alianza, que se derrama por muchos para la remisión de los pecados.28 perché questo è il mio sangue dell’alleanza, che è versato per molti per il perdono dei peccati.
29 Les aseguro que desde ahora no beberé más de este fruto de la vid, hasta el día en que beba con ustedes el vino nuevo en el Reino de mi Padre».29 Io vi dico che d’ora in poi non berrò di questo frutto della vite fino al giorno in cui lo berrò nuovo con voi, nel regno del Padre mio».
30 Después del canto de los Salmos, salieron hacia el monto de los Olivos.30 Dopo aver cantato l’inno, uscirono verso il monte degli Ulivi.
31 Entonces Jesús les dijo: «Esta misma noche, ustedes se van a escandalizar a causa de mí. Porque dice la Escritura: Heriré al pastor, y se dispersarán las ovejas del rebaño.31 Allora Gesù disse loro: «Questa notte per tutti voi sarò motivo di scandalo. Sta scritto infatti:
Percuoterò il pastore
e saranno disperse le pecore del gregge.
32 Pero después que yo resucite, iré antes que ustedes a Galilea».32 Ma, dopo che sarò risorto, vi precederò in Galilea».
33 Pedro, tomando la palabra, le dijo: «Aunque todos se escandalicen por tu causa, yo no me escandalizaré jamás».33 Pietro gli disse: «Se tutti si scandalizzeranno di te, io non mi scandalizzerò mai».
34 Jesús le respondió: «Te aseguro que esta misma noche, antes que cante el gallo, me habrás negado tres veces».34 Gli disse Gesù: «In verità io ti dico: questa notte, prima che il gallo canti, tu mi rinnegherai tre volte».
35 Pedro le dijo: «Aunque tenga que morir contigo, jamás te negaré». Y todos los discípulos dijeron lo mismo.35 Pietro gli rispose: «Anche se dovessi morire con te, io non ti rinnegherò». Lo stesso dissero tutti i discepoli.
36 Cuando Jesús llegó con sus discípulos a una propiedad llamada Getsemaní, les dijo: «Quédense aquí, mientras yo voy allí a orar».36 Allora Gesù andò con loro in un podere, chiamato Getsèmani, e disse ai discepoli: «Sedetevi qui, mentre io vado là a pregare».
37 Y llevando con él a Pedro y a los dos hijos de Zebedeo, comenzó a entristecerse y a angustiarse.37 E, presi con sé Pietro e i due figli di Zebedeo, cominciò a provare tristezza e angoscia.
38 Entonces les dijo: «Mi alma siente una tristeza de muerte. Quédense aquí, velando conmigo».38 E disse loro: «La mia anima è triste fino alla morte; restate qui e vegliate con me».
39 Y adelantándose un poco, cayó con el rostro en tierra, orando así: «Padre mío, si es posible, que pase lejos de mí este cáliz, pero no se haga mi voluntad, sino la tuya».39 Andò un poco più avanti, cadde faccia a terra e pregava, dicendo: «Padre mio, se è possibile, passi via da me questo calice! Però non come voglio io, ma come vuoi tu!».
40 Después volvió junto a sus discípulos y los encontró durmiendo. Jesús dijo a Pedro: «¿Es posible que no hayan podido quedarse despiertos conmigo, ni siquiera una hora?40 Poi venne dai discepoli e li trovò addormentati. E disse a Pietro: «Così, non siete stati capaci di vegliare con me una sola ora?
41 Estén prevenidos y oren para no caer en tentación, porque el espíritu está dispuesto, pero la carne es débil».41 Vegliate e pregate, per non entrare in tentazione. Lo spirito è pronto, ma la carne è debole».
42 Se alejó por segunda vez y suplicó: «Padre mío, si no puede pasar este cáliz sin que yo lo beba, que se haga tu voluntad».42 Si allontanò una seconda volta e pregò dicendo: «Padre mio, se questo calice non può passare via senza che io lo beva, si compia la tua volontà».
43 Al regresar los encontró otra vez durmiendo, porque sus ojos se cerraban de sueño.43 Poi venne e li trovò di nuovo addormentati, perché i loro occhi si erano fatti pesanti.
44 Nuevamente se alejó de ellos y oró por tercera vez, repitiendo las mismas palabras.44 Li lasciò, si allontanò di nuovo e pregò per la terza volta, ripetendo le stesse parole.
45 Luego volvió junto a sus discípulos y les dijo: «Ahora pueden dormir y descansar: ha llegado la hora en que el Hijo del hombre va a ser entregado en manos de los pecadores.45 Poi si avvicinò ai discepoli e disse loro: «Dormite pure e riposatevi! Ecco, l’ora è vicina e il Figlio dell’uomo viene consegnato in mano ai peccatori.
46 ¡Levántense! ¡Vamos! Ya se acerca el que me va a entregar».46 Alzatevi, andiamo! Ecco, colui che mi tradisce è vicino».
47 Jesús estaba hablando todavía, cuando llegó Judas, uno de los Doce, acompañado de una multitud con espadas y palos, enviada por los sumos sacerdotes y los ancianos del pueblo.47 Mentre ancora egli parlava, ecco arrivare Giuda, uno dei Dodici, e con lui una grande folla con spade e bastoni, mandata dai capi dei sacerdoti e dagli anziani del popolo.
48 El traidor les había dado la señal: «Es aquel a quien voy a besar. Deténganlo».48 Il traditore aveva dato loro un segno, dicendo: «Quello che bacerò, è lui; arrestatelo!».
49 Inmediatamente se acercó a Jesús, diciéndole: «Salud, Maestro», y lo besó.49 Subito si avvicinò a Gesù e disse: «Salve, Rabbì!». E lo baciò.
50 Jesús le dijo: «Amigo, ¡cumple tu cometido!». Entonces se abalanzaron sobre él y lo detuvieron.50 E Gesù gli disse: «Amico, per questo sei qui!». Allora si fecero avanti, misero le mani addosso a Gesù e lo arrestarono.
51 Uno de los que estaban con Jesús sacó su espada e hirió al servidor del Sumo Sacerdote, cortándole la oreja.51 Ed ecco, uno di quelli che erano con Gesù impugnò la spada, la estrasse e colpì il servo del sommo sacerdote, staccandogli un orecchio.
52 Jesús le dijo: «Guarda tu espada, porque el que a hierro mata a hierro muere.52 Allora Gesù gli disse: «Rimetti la tua spada al suo posto, perché tutti quelli che prendono la spada, di spada moriranno.
53 ¿O piensas que no puedo recurrir a mi Padre? El pondría inmediatamente a mi disposición más de doce legiones de ángeles.53 O credi che io non possa pregare il Padre mio, che metterebbe subito a mia disposizione più di dodici legioni di angeli?
54 Pero entonces, ¿cómo se cumplirían las Escrituras, según las cuales debe suceder así?».54 Ma allora come si compirebbero le Scritture, secondo le quali così deve avvenire?».
55 Y en ese momento dijo Jesús a la multitud: «¿Soy acaso un ladrón, para que salgan a arrestarme con espadas y palos? Todos los días me sentaba a enseñar en el Templo, y ustedes no me detuvieron».55 In quello stesso momento Gesù disse alla folla: «Come se fossi un ladro siete venuti a prendermi con spade e bastoni. Ogni giorno sedevo nel tempio a insegnare, e non mi avete arrestato.
56 Todo esto sucedió para que se cumpliera lo que escribieron los profetas. Entonces todos los discípulos lo abandonaron y huyeron.56 Ma tutto questo è avvenuto perché si compissero le Scritture dei profeti». Allora tutti i discepoli lo abbandonarono e fuggirono.
57 Los que habían arrestado a Jesús lo condujeron a la casa del Sumo Sacerdote Caifás, donde se habían reunido los escribas y los ancianos.57 Quelli che avevano arrestato Gesù lo condussero dal sommo sacerdote Caifa, presso il quale si erano riuniti gli scribi e gli anziani.
58 Pedro lo seguía de lejos hasta el palacio del Sumo Sacerdote; entró y se sentó con los servidores, para ver cómo terminaba todo.58 Pietro intanto lo aveva seguito, da lontano, fino al palazzo del sommo sacerdote; entrò e stava seduto fra i servi, per vedere come sarebbe andata a finire.
59 Los sumos sacerdotes y todo el Sanedrín buscaban un falso testimonio contra Jesús para poder condenarlo a muerte;59 I capi dei sacerdoti e tutto il sinedrio cercavano una falsa testimonianza contro Gesù, per metterlo a morte;
60 pero no lo encontraron, a pesar de haberse presentado numerosos testigos falsos. Finalmente, se presentaron dos60 ma non la trovarono, sebbene si fossero presentati molti falsi testimoni. Finalmente se ne presentarono due,
61 que declararon: «Este hombre dijo: "Yo puedo destruir el Templo de Dios y reconstruirlo en tres días"».61 che affermarono: «Costui ha dichiarato: “Posso distruggere il tempio di Dio e ricostruirlo in tre giorni”».
62 El Sumo Sacerdote, poniéndose de pie, dijo a Jesús: «¿No respondes nada? ¿Qué es lo que estos declaran contra ti?».62 Il sommo sacerdote si alzò e gli disse: «Non rispondi nulla? Che cosa testimoniano costoro contro di te?».
63 Pero Jesús callaba. El Sumo Sacerdote insistió: «Te conjuro por el Dios vivo a que me digas si tú eres el Mesías, el Hijo de Dios».63 Ma Gesù taceva. Allora il sommo sacerdote gli disse: «Ti scongiuro, per il Dio vivente, di dirci se sei tu il Cristo, il Figlio di Dio».
64 Jesús le respondió: «Tú lo has dicho. Además, les aseguro que de ahora en adelante verán al hijo del hombre sentarse a la derecha del Todopoderoso y venir sobre las nubes del cielo».64 «Tu l’hai detto – gli rispose Gesù –; anzi io vi dico:
d’ora innanzi vedrete il Figlio dell’uomo
seduto alla destra della Potenza
e venire sulle nubi del cielo».
65 Entonces el Sumo Sacerdote rasgó sus vestiduras, diciendo: «Ha blasfemado. ¿Qué necesidad tenemos ya de testigos? Ustedes acaban de oír la blasfemia.65 Allora il sommo sacerdote si stracciò le vesti dicendo: «Ha bestemmiato! Che bisogno abbiamo ancora di testimoni? Ecco, ora avete udito la bestemmia;
66 ¿Qué les parece?». Ellos respondieron: «Merece la muerte».66 che ve ne pare?». E quelli risposero: «È reo di morte!».
67 Luego lo escupieron en la cara y lo abofetearon. Otros lo golpeaban,67 Allora gli sputarono in faccia e lo percossero; altri lo schiaffeggiarono,
68 diciéndole: «Tú, que eres el Mesías, profetiza, dinos quién te golpeó».68 dicendo: «Fa’ il profeta per noi, Cristo! Chi è che ti ha colpito?».
69 Mientras tanto, Pedro estaba sentado afuera, en el patio. Una sirvienta se acercó y le dijo: «Tú también estabas con Jesús, el Galileo».69 Pietro intanto se ne stava seduto fuori, nel cortile. Una giovane serva gli si avvicinò e disse: «Anche tu eri con Gesù, il Galileo!».
70 Pero él lo negó delante de todos, diciendo: «No sé lo que quieres decir».70 Ma egli negò davanti a tutti dicendo: «Non capisco che cosa dici».
71 Al retirarse hacia la puerta, lo vio otra sirvienta y dijo a los que estaban allí: «Este es uno de los que acompañaban a Jesús, el Nazareno».71 Mentre usciva verso l’atrio, lo vide un’altra serva e disse ai presenti: «Costui era con Gesù, il Nazareno».
72 Y nuevamente Pedro negó con juramento: «Yo no conozco a ese hombre».72 Ma egli negò di nuovo, giurando: «Non conosco quell’uomo!».
73 Un poco más tarde, los que estaban allí se acercaron a Pedro y le dijeron: «Seguro que tú también eres uno de ellos; hasta tu acento te traiciona».73 Dopo un poco, i presenti si avvicinarono e dissero a Pietro: «È vero, anche tu sei uno di loro: infatti il tuo accento ti tradisce!».
74 Entonces Pedro se puso a maldecir y a jurar que no conocía a ese hombre. En seguida cantó el gallo,74 Allora egli cominciò a imprecare e a giurare: «Non conosco quell’uomo!». E subito un gallo cantò.
75 y Pedro recordó las palabras que Jesús había dicho: «Antes que cante el gallo, me negarás tres veces». Y saliendo, lloró amargamente.75 E Pietro si ricordò della parola di Gesù, che aveva detto: «Prima che il gallo canti, tu mi rinnegherai tre volte». E, uscito fuori, pianse amaramente.