Scrutatio

Mercoledi, 1 maggio 2024 - San Giuseppe Lavoratore ( Letture di oggi)

Evangelho segundo São Mateus 17


font
SAGRADA BIBLIAEL LIBRO DEL PUEBLO DE DIOS
1 Seis dias depois, Jesus tomou consigo Pedro, Tiago e João, seu irmão, e conduziu-os à parte a uma alta montanha.1 Seis días después, Jesús tomó a Pedro, a Santiago y a su hermano Juan, y los llevó aparte a un monte elevado.
2 Lá se transfigurou na presença deles: seu rosto brilhou como o sol, suas vestes tornaram-se resplandecentes de brancura.2 Allí se transfiguró en presencia de ellos: su rostro resplandecía como el sol y sus vestiduras se volvieron blancas como la luz.
3 E eis que apareceram Moisés e Elias conversando com ele.3 De pronto se les aparecieron Moisés y Elías, hablando con Jesús.
4 Pedro tomou então a palavra e disse-lhe: Senhor, é bom estarmos aqui. Se queres, farei aqui três tendas: uma para ti, uma para Moisés e outra para Elias.4 Pedro dijo a Jesús: «Señor, ¡qué bien estamos aquí! Si quieres, levantará aquí mismo tres carpas, una para ti, otra para Moisés y otra para Elías».
5 Falava ele ainda, quando veio uma nuvem luminosa e os envolveu. E daquela nuvem fez-se ouvir uma voz que dizia: Eis o meu Filho muito amado, em quem pus toda minha afeição; ouvi-o.5 Todavía estaba hablando, cuando una nube luminosa los cubrió con su sombra y se oyó una voz que decía desde la nube: «Este es mi Hijo muy querido, en quien tengo puesta mi predilección: escúchenlo».
6 Ouvindo esta voz, os discípulos caíram com a face por terra e tiveram medo.6 Al oír esto, los discípulos cayeron con el rostro en tierra, llenos de temor.
7 Mas Jesus aproximou-se deles e tocou-os, dizendo: Levantai-vos e não temais.7 Jesús se acercó a ellos, y tocándolos, les dijo: «Levántense, no tengan miedo».
8 Eles levantaram os olhos e não viram mais ninguém, senão unicamente Jesus.8 Cuando alzaron los ojos, no vieron a nadie más que a Jesús solo.
9 E, quando desciam, Jesus lhes fez esta proibição: Não conteis a ninguém o que vistes, até que o Filho do Homem ressuscite dos mortos.9 Mientras bajaban del monte, Jesús les ordenó: «No hablen a nadie de esta visión, hasta que el Hijo del hombre resucite de entre los muertos».
10 Em seguida, os discípulos o interrogaram: Por que dizem os escribas que Elias deve voltar primeiro?10 Entonces los discípulos le preguntaron: «¿Por qué dicen los escribas que primero debe venir Elías?».
11 Jesus respondeu-lhes: Elias, de fato, deve voltar e restabelecer todas as coisas.11 El respondió: «Sí, Elías debe venir a poner en orden todas las cosas;
12 Mas eu vos digo que Elias já veio, mas não o conheceram; antes, fizeram com ele quanto quiseram. Do mesmo modo farão sofrer o Filho do Homem.12 pero les aseguro que Elías ya ha venido, y no lo han reconocido, sino que hicieron con él lo que quisieron. Y también harán padecer al Hijo del hombre».
13 Os discípulos compreenderam, então, que ele lhes falava de João Batista.13 Los discípulos comprendieron entonces que Jesús se refería a Juan el Bautista.
14 E, quando eles se reuniram ao povo, um homem aproximou-se deles e prostrou-se diante de Jesus,14 Cuando se reunieron con la multitud se le acercó un hombre y, cayendo de rodillas,
15 dizendo: Senhor, tem piedade de meu filho, porque é lunático e sofre muito: ora cai no fogo, ora na água...15 le dijo: «Señor, ten piedad de mí hijo, que es epiléptico y está muy mal: frecuentemente cae en el fuego y también en el agua.
16 Já o apresentei a teus discípulos, mas eles não o puderam curar.16 Yo lo llevé a tus discípulos, pero no lo pudieron curar».
17 Respondeu Jesus: Raça incrédula e perversa, até quando estarei convosco? Até quando hei de aturar-vos? Trazei-mo.17 Jesús respondió: «¡Generación incrédula y perversa! ¿Hasta cuándo estaré con ustedes? ¿Hasta cuándo tendré que soportarlos? Tráiganmelo aquí».
18 Jesus ameaçou o demônio e este saiu do menino, que ficou curado na mesma hora.18 Jesús increpó al demonio, y este salió del niño, que desde aquel momento, quedó curado.
19 Então os discípulos lhe perguntaram em particular: Por que não pudemos nós expulsar este demônio?19 Los discípulos se acercaron entonces a Jesús y le preguntaron en privado: «¿Por qué nosotros no pudimos expulsarlo?».
20 Jesus respondeu-lhes: Por causa de vossa falta de fé. Em verdade vos digo: se tiverdes fé, como um grão de mostarda, direis a esta montanha: Transporta-te daqui para lá, e ela irá; e nada vos será impossível.20 «Porque ustedes tienen poca fe, les dijo. Les aseguro que si tuvieran fe del tamaño de un grano de mostaza, dirían a esta montaña: «Trasládate de aquí a allá», y la montaña se trasladaría; y nada sería imposible para ustedes».
21 Quanto a esta espécie de demônio, só se pode expulsar à força de oração e de jejum.21 [«En cuanto a esta clase de demonios, no se los puede expulsar sino por medio de la oración y del ayuno»].
22 Enquanto caminhava pela Galiléia, Jesus lhes disse: O Filho do Homem deve ser entregue nas mãos dos homens.22 Mientras estaban reunidos en Galilea, Jesús les dijo: «El Hijo del hombre va a ser entregado en manos de los hombres:
23 Matá-lo-ão, mas ao terceiro dia ressuscitará. E eles ficaram profundamente aflitos.23 lo matarán y al tercer día resucitará». Y ellos quedaron muy apenados.
24 Logo que chegaram a Cafarnaum, aqueles que cobravam o imposto da didracma aproximaram-se de Pedro e lhe perguntaram: Teu mestre não paga a didracma?24 Al llegar a Cafarnaúm, los cobradores del impuesto del Templo se acercaron a Pedro y le preguntaron: «¿El Maestro de ustedes no paga el impuesto?».
25 Paga sim, respondeu Pedro. Mas quando chegaram à casa, Jesus preveniu-o, dizendo: Que te parece, Simão? Os reis da terra, de quem recebem os tributos ou os impostos? De seus filhos ou dos estrangeiros?25 «Sí, lo paga», respondió. Cuando Pedro llegó a la casa, Jesús se adelantó a preguntarle: «¿Qué te parece, Simón? ¿De quiénes perciben los impuestos y las tasas los reyes de la tierra, de sus hijos o de los extraños?».
26 Pedro respondeu: Dos estrangeiros. Jesus replicou: Os filhos, então, estão isentos.26 Y como Pedro respondió: «De los extraños», Jesús le dijo: «Eso quiere decir que los hijos están exentos.
27 Mas não convém escandalizá-los. Vai ao mar, lança o anzol, e ao primeiro peixe que pegares abrirás a boca e encontrarás um estatere. Toma-o e dá-o por mim e por ti.27 Sin embargo, para no escandalizar a esta gente, ve al lago, echa el anzuelo, toma el primer pez que salga y ábrele la boca. Encontrarás en ella una moneda de plata: tómala, y paga por mí y por ti».