Scrutatio

Sabato, 11 maggio 2024 - San Fabio e compagni ( Letture di oggi)

Ezequiel 26


font
EL LIBRO DEL PUEBLO DE DIOSBIBLIA
1 En el año undécimo, el primer día del mes, la palabra del Señor me llegó en estos términos:1 El año undécimo, el día primero del mes, la palabra de Yahveh me fue dirigida en estos términos:
2 Hijo de hombre, porque Tiro se ha reído de Jerusalén, diciendo: «¡La «Puerta de los pueblos» se ha roto a pedazos! ¡Ha llegado mi turno: yo me llenaré de riquezas, ahora que ella está en ruinas!»,2 Hijo de hombre, porque Tiro ha dicho contra Jerusalén: «¡Ja, ja! ahí está rota, la puerta de los pueblos; se vuelve hacia mí, su riqueza está en ruinas»,
3 por eso, así habla el Señor: Aquí estoy, Tiro, contra ti: Yo haré subir contra ti a naciones numerosas, como el mar hace subir su oleaje.3 por eso, así dice el Señor Yahveh: Aquí estoy contra ti, Tiro. Voy a hacer subir contra ti a naciones numerosas, como el mar hace subir sus olas.
4 Destruirán las murallas de Tiro y derribarán sus torres. Barreré de ella hasta el polvo y la convertiré en una roca desnuda.4 Derruirán las murallas de Tiro y abatirán sus torres. Yo barreré de ella hasta el polvo y la dejaré como roca pelada.
5 Ella será en medio del mar un lugar para secar las redes, porque yo ha hablado –oráculo del Señor–. Sí, Tiro será presa de las naciones5 Quedará, en medio del mar, como un secadero de redes. Porque he hablado yo, oráculo del Señor Yahveh. Tiro será presa propicia para las naciones.
6 y sus poblados de tierra adentro serán aniquilados por la espada. Así se sabrá que yo soy el Señor.6 Y sus hijas que están tierra adentro serán muertas a espada. Y se sabrá que yo soy Yahveh.
7 Porque así habla el Señor: Yo voy a traer contra Tiro, desde el Norte, a Nabucodonosor, rey de Babilonia, rey de reyes, y él vendrá con caballos, carros de guerra y jinetes, y con una coalición de pueblos numerosos.7 Pues así dice el Señor Yahveh: He aquí que yo traigo contra Tiro, por el norte, a Nabucodonosor, rey de Babilonia, rey de reyes, con caballos, carros y jinetes y gran número de tropas.
8 El pasará por la espada a tus poblados de tierra adentro. Armará contra ti torres de asalto, elevará contra ti terraplenes y levantará contra ti sus escudos.8 A tus hijas que están tierra adentro las matará a espada. Hará contra ti trincheras, levantará contra ti un terraplén, alzará contra ti un testudo,
9 Lanzará golpes de ariete contra tus muros y demolerá tus torres con sus hachas.9 lanzará los golpes de su ariete contra tus murallas, demolerá tus torres con sus máquinas.
10 Será tal la cantidad de sus caballos que te dejará cubierta de polvo. Tus murallas temblarán al estruendo de su caballería, de sus ruedas y sus carros, cuando él entre por tus puertas como se entra en una ciudad expugnada.10 Sus caballos son tan numerosos que su polvo te cubrirá. Al estrépito de su caballería, de sus carros y carretas, trepidarán tus murallas cuando entre él por tus puertas, como se entra en una ciudad, brecha abierta.
11 Pisoteará todas tus calles con los cascos de sus caballos; matará a tu pueblo con la espada, y tus sólidos pilares se derrumbarán por tierra.11 Con los cascos de sus caballos hollará todas tus calles, a tu pueblo pasará a cuchillo, y tus grandiosas estelas se desplomarán en tierra.
12 Se llevarán tus riquezas como botín, saquearán tus mercancías, derribarán tus murallas y demolerán tus lujosas mansiones. Hundirán en el fondo del mar tus piedras, tus vigas y tus escombros.12 Se llevarán como botín tus riquezas, saquearán tus mercancías, destruirán tus murallas, demolerán tus casas suntuosas. Tus piedras, tus vigas y tus escombros los echarán al fondo de las aguas.
13 Yo haré cesar la algarabía de tus canciones y ya no se escuchará el sonido de tus cítaras.13 Yo haré cesar la armonía de tus canciones, y no se volverá a oír el son de tus cítaras.
14 Te convertiré en una roca desnuda, en un lugar para secar las redes. No volverás a ser edificada, porque yo, el Señor, he hablado –oráculo del Señor–.14 Te convertiré en roca pelada, quedarás como secadero de redes; no volverás a ser reconstruida, porque yo, Yahveh, he hablado, oráculo del Señor Yahveh.
15 Así habla el Señor a Tiro: ¡Cómo temblarán las costas lejanas por el estruendo de tu caída, cuando giman las víctimas y haya una mortandad en medio de ti!15 Así dice el Señor Yahveh a Tiro: Al estruendo de tu caída, cuando giman las víctimas, cuando hierva la carnicería en medio de ti, ¿no temblarán las islas?
16 Todos los príncipes del mar bajarán de sus tronos, se quitarán sus mantos y se despojarán de sus vestiduras bordadas. Estremecidos de espanto, se sentarán en el suelo, temblarán sin cesar y quedarán consternados por ti.16 Bajarán de sus tronos todos los príncipes del mar, se quitarán sus mantos, dejarán sus vestidos recamados. Se vestirán de pavores, se sentarán en tierra, sin tregua temblarán y quedarán pasmados por ti.
17 Ellos entonarán por ti esta lamentación: «¡Cómo has desaparecido, barrida por los mares, tú, ciudad tan ilustre, poderosa en el mar, cuyos habitantes infundían terror en todo el continente!17 Entonarán por ti una elegía y te dirán: ¡Ah! ahí estás destruida, desaparecida de los mares, la ciudad famosa, que fue poderosa en el mar, con tus habitantes, los que infundían el terror en todo el continente.
18 Ahora tiemblan las costas en el día de tu caída, y las islas que están en el mar se horrorizan de tu desenlace!».18 Ahora tiemblan las islas en el día de tu caída, las islas del mar están aterradas de tu fin.
19 Porque así habla el Señor: Cuando yo haga de ti una ciudad en ruinas, como las ciudades donde nadie habita; cuando haga subir contra ti el océano y te cubran las aguas caudalosas,19 Porque así dice el Señor Yahveh: Cuando yo te convierta en una ciudad en ruinas como las ciudades despobladas, cuando yo empuje sobre ti el océano, y te cubran las muchas aguas,
20 entonces te precipitaré con los que bajan a la Fosa, con los hombres del pasado; te haré habitar en las regiones profundas, en las soledades perpetuas, con los que bajan a la Fosa, para que no vuelvas a ser restablecida en la tierra de los vivientes.20 entonces te precipitaré con los que bajan a la fosa, con el pueblo de antaño; te haré habitar en los infiernos, como las ruinas de antaño, con los que bajan a la fosa, para que no vuelvas a ser restablecida en la tierra de los vivos.
21 Haré que seas un objeto de espanto, y no existirás más. Te buscarán, y no te encontrarán jamás –oráculo del Señor–.21 Haré de ti un objeto de espanto, y no existirás más. Se te buscará y no se te encontrará jamás, oráculo del Señor Yahveh.