Scrutatio

Sabato, 11 maggio 2024 - San Fabio e compagni ( Letture di oggi)

2 Macabeos 12


font
EL LIBRO DEL PUEBLO DE DIOSSAGRADA BIBLIA
1 Concluidas las negociaciones, Lisias volvió adonde estaba el rey, mientras los judíos se dedicaban a los trabajos del campo.1 Concluídos esses tratados, voltou Lísias para junto do rei, e os judeus voltaram aos trabalhos dos campos.
2 Pero algunos de los gobernadores locales, Timoteo y Apolonio, hijo de Geneo, además de Jerónimo y Demofón, y también Nicanor, jefe de los chipriotas, no los dejaban vivir tranquilos ni disfrutar de la paz.2 No entanto, chefes militares locais, como Timóteo, Apolônio, filho de Jeneu, Jerônimo e Demofonte, e além destes, o cipriarca Nicanor, não lhes davam trégua, nem os deixavam viver em repouso.
3 Algunos habitantes de Jope, por su parte, perpetraron un enorme crimen. En efecto, invitaron a los judíos que vivían con ellos a subir con sus mujeres e hijos a unas embarcaciones que habían equipado, disimulando las malas intenciones que tenían contra ellos.3 Por outro lado, os habitantes de Jope praticaram a seguinte infâmia: convidaram os judeus que habitavam entre eles a subir com suas mulheres e filhos para barcas que eles haviam preparado. Não davam a entender intenção malvada alguma a seu respeito,
4 Como se trataba de una decisión unánime de toda la ciudad, los judíos aceptaron la invitación, porque deseaban vivir en paz y no tenían ninguna sospecha. Pero una vez que estuvieron en alta mar, los tiraron al agua: así murieron alrededor de doscientos.4 mas pareciam proceder, seguindo uma decisão votada pela cidade. Os judeus, pacíficos e sem suspeitarem, anuíram, mas quando chegaram ao alto-mar foram afogados em número de duzentos pelo menos.
5 Cuando Judas se enteró de la crueldad cometida contra los compatriotas, hizo saber a sus hombres lo que había pasado5 Mal soube Judas do crime praticado contra a gente de sua nação, convocou seus homens.
6 y, después de invocar a Dios, el justo Juez, se dirigió contra los asesinos de sus hermanos; incendió el puerto durante la noche, prendió fuego a las embarcaciones e hizo perecer a los que se habían refugiado allí.6 Depois de ter invocado a Deus, justo juiz, foi contra os carrascos de seus irmãos e, de noite, ateou fogo ao porto, incendiou as embarcações e passou a fio de espada os que ali se haviam refugiado.
7 Como las puertas de la ciudad estaban cerradas, se retiró con la intención de volver y exterminar por completo la población de Jope.7 Como a cidade mesma estivesse fechada, afastou-se, mas com a intenção de voltar e exterminar todos os habitantes de Jope.
8 Informado, entre tanto, de que los de Iamnia maquinaban hacer algo parecido con los judíos que vivían allí,8 Por outro lado, advertido de que os habitantes de Jânia queriam tratar do mesmo modo os judeus que viviam com eles,
9 atacó también durante la noche a los iamnitas e incendió el puerto y la flota, de manera que el resplandor de las llamas se vio incluso en Jerusalén, a una distancia de casi cincuenta kilómetros.9 atacou-os naquela mesma noite e incendiou o porto com a esquadra. De Jerusalém, que dista duzentos e quarenta estádios, podia-se observar o clarão do fogo.
10 Cuando estaba a dos kilómetros de allí, en una expedición contra Timoteo, lo atacaron unos árabes: eran no menos de cinco mil de a pie y quinientos jinetes.10 Percorridos já nove estádios, no seu avanço contra Timóteo, lançaram-se sobre eles os árabes em número de pelo menos cinco mil a pé e quinhentos a cavalo.
11 Se entabló una lucha encarnizada, y las tropas de Judas obtuvieron la victoria, gracias al auxilio de Dios. Los nómadas, derrotados, pidieron la paz a Judas, comprometiéndose a darles ganado y a ayudarlos en lo sucesivo.11 Travou-se um combate violento, mas, com a ajuda de Deus, os soldados de Judas venceram-nos, e,
12 Judas, comprendiendo que podrían prestarle muchos servicios, accedió a hacer la paz con ellos y, después de estrecharse la mano, los árabes regresaron a sus campamentos.12 Crendo que, na verdade, eles lhe poderiam ser úteis, Judas aceitou a paz com eles, e, concluída esta, regressaram às suas tendas.
13 Luego atacó a una ciudad fortificada con terraplenes, rodeada de murallas y habitada por gente de diversas nacionalidades, que se llamaba Caspín.13 Em seguida, atacou Judas uma cidade forte, chamada Caspim, cercada de muralhas, habitada por uma mistura de povos.
14 Los sitiados, confiando en la solidez de las murallas y en la reserva de víveres, trataban despectivamente a los hombres de Judas, insultándolos y profiriendo blasfemias y maldiciones.14 Confiados na firmeza de seus muros e na abundância de suas provisões, os sitiados mostraram-se excessivamente grosseiros contra as tropas de Judas, lançando-lhes injúrias, blasfêmias e palavras ímpias.
15 Judas y sus compañeros –después de invocar al supremo Señor del universo que, sin arietes ni máquinas de guerra, derribó a Jericó en tiempos de Josué– asaltaron ferozmente la muralla.15 Judas juntamente com os seus invocaram o grande Senhor do mundo, que, no tempo de Josué, derribou os muros de Jericó sem aríetes nem máquinas de guerra; depois, investiram furiosamente contra a muralha.
16 Y apoderándose de la ciudad, por la voluntad de Dios, realizaron una matanza indescriptible, hasta tal punto que el lago vecino, de quince metros de ancho, parecía colmado con la sangre que lo había inundado.16 Uma vez senhores da cidade pela vontade de Deus, praticaram uma horrorosa carnificina, a ponto de um tanque vizinho, com a largura de dois estádios, parecer cheio de sangue que ali se derramou.
17 Luego se alejaron de allí ciento cincuenta kilómetros y llegaron a Járaca, donde vivían los judíos llamados tubienos.17 Dali, após uma marcha de setecentos e cinqüenta estádios, alcançaram o acampamento fortificado onde habitavam os judeus, chamados tubianeus.
18 Pero no encontraron a Timoteo por aquellas regiones, porque en vista de que no conseguía nada, se había retirado de allí, no sin antes dejar en cierto lugar una guarnición bastante fuerte.18 Não acharam ali, todavia, Timóteo: ele havia deixado os lugares sem ter conseguido nada, mas deixara num posto uma guarnição muito forte.
19 Dositeo y Sosípatro, capitanes de Macabeo, avanzaron contra la fortaleza y mataron a los hombres que Timoteo había dejado en ella: eran más de diez mil.19 Dositeu e Sosípatro, que comandavam tropas de Macabeu, foram atacar esse posto fortificado e mataram todos os homens que Timóteo ali havia colocado, isto é, mais de dez mil.
20 Luego el Macabeo distribuyó su ejército en batallones; puso al frente a aquellos dos capitales y se dirigió contra Timoteo, que había reunido ciento veinte mil soldados y dos mil quinientos jinetes.20 Macabeu dividiu então seu exército e confiou a cada um deles uma parte; em seguida foi contra Timóteo, acompanhado de cento e vinte mil infantes e dois mil e quinhentos cavaleiros.
21 Al enterarse de que se acercaba Judas, Timoteo mandó que las mujeres y los niños, junto con el resto del equipaje, se adelantaran hasta la fortaleza llamada Carnión, que era inexpugnable y de difícil acceso, por lo accidentado del terreno.21 Logo que teve conhecimento da chegada de Judas, Timóteo conduziu as mulheres, as cr ianças e as bagagens para um lugar chamado Carnion, porque era um lugar tornado inexpugnável pelos desfiladeiros e de acesso muito difícil.
22 Apenas apareció el primer batallón de Judas, el pánico y el terror se apoderaron de los enemigos, porque se manifestó ante ellos Aquel que todo lo ve. Entonces huyeron en todas direcciones, de manera que muchas veces se herían unos a otros y se atravesaban entre ellos mismos con sus espadas.22 Quando apareceu o primeiro exército de Judas, o terror apoderou-se logo dos inimigos, porque aquele que vê todas as coisas manifestou-se a seus olhos; e fugiram em todas as direções, ferindo-se constantemente uns aos outros e transpassando-se com as suas próprias espadas.
23 Judas los perseguía implacablemente, acribillando a aquellos impíos, y así llegó a matar a unos treinta mil.23 Judas perseguiu encarniçadamente esses malfeitores, matando e massacrando até trinta mil homens.
24 Timoteo, que cayó en manos de los hombres de Dositeo y Sosípatro, les pidió con mucha habilidad que lo dejaran en libertad, porque los padres y hermanos de muchos de ellos estaban en su poder y corrían el riesgo de ser ejecutados.24 O próprio Timóteo caiu nas mãos dos homens de Dositeu e de Sosípatro, aos quais pediu com grandes instâncias deixá-lo partir são e salvo, porque tinha em seu poder os pais e mesmo os irmãos da maior parte deles, que poderiam ser maltratados.
25 Cuando les aseguró con toda clase de argumentos que los devolvería sanos y salvos, lo pusieron en libertad, para salvar a sus hermanos.25 Dava-lhes numerosas garantias e prometia libertar seus prisioneiros sem fazer-lhes mal; e com isso soltaram-no, para salvar seus irmãos.
26 Después, Judas marchó contra Carnión y contra el templo de Atargatis y mató a veinticinco mil personas.26 Em seguida, Judas atacou Carnion e o templo de Atargatis e massacrou vinte e cinco mil homens.
27 Una vez derrotados y destruidos estos enemigos, Judas emprendió una campaña contra la plaza fuerte de Efrón, donde se había establecido Lisias con gente de todas partes. Jóvenes vigorosos apostados delante de las murallas combatían con vigor, y en el interior había muchas reservas de máquinas de guerra y proyectiles.27 Depois dessa perseguição e matança, conduziu suas tropas diante de Efron, cidade forte, onde habitava Lísias e gente de todas as nações. Jovens robustos, colocados em frente à muralha, defendiam-na valentemente: dentro havia grande provisão de máquinas e projéteis.
28 Después de invocar al Soberano que aplasta con su poder las fuerzas de los enemigos, los judíos se apoderaron de la ciudad y mataron allí a unas veinticinco mil personas.28 Os judeus invocaram o Soberano que tem o poder de aniquilar as forças dos inimigos, tornaram-se senhores da cidade e mataram ali vinte e cinco mil homens.
29 Partiendo de allí, avanzaron contra Escitópolis, que dista de Jerusalén unos ciento diez kilómetros.29 Dali partiram eles para alcançar a cidade de Citópolis, a seiscentos estádios de Jerusalém.
30 Pero los judíos que vivían allí les atestiguaron que los habitantes de la ciudad los habían tratado con benevolencia y les habían brindado una buena acogida en momentos de adversidad.30 Todavia, os judeus que habitavam ali atestaram que os citopolitanos haviam usado de benevolência para com eles e os haviam tratado com deferência no tempo da perseguição.
31 Entonces Judas y sus compañeros les dieron las gracias y los exhortaron a seguir siendo deferentes con sus compatriotas. Luego regresaron a Jerusalén, porque se acercaba la fiesta de las Semanas.31 Judas e os seus agradeceram, pois, a estes e os exortaram a perseverar nessas disposições para com os de sua raça; em seguida entraram em Jerusalém, porque a festa das Semanas se aproximava.
32 Pasada la fiesta llamada de Pentecostés, se dirigieron contra Gorgias, gobernador de Idumea.32 Passada a festa de Pentecostes, foram contra Górgias, chefe militar da Iduméia;
33 Este salió a atacarlos con tres mil soldados y cuatrocientos jinetes,33 esse saiu-lhes ao encontro com três mil infantes e quatrocentos cavaleiros;
34 y cayeron en el combate algunos judíos.34 e travou-se uma batalha na qual pereceram alguns judeus.
35 Un tal Dositeo, valeroso jinete de las tropas de Bacenor, se apoderó de Gorgias y, tirándole de la capa, lo arrastraba con fuerza a fin de capturar vivo a aquel infame. Pero un jinete tracio se abalanzó sobre Dositeo y lo hirió por la espalda, y así Gorgias pudo huir hacia Marisa.35 Dositeu, um dos cavaleiros de Baquenor, muito corajoso, apoderou-se de Górgias; retendo-o pela clâmide, arrastava-o à força, a fim de capturar vivo o maldito, quando se precipitou sobre ele um cavaleiro da Trácia, que lhe decepou um ombro, e Górgias fugiu para Marisa.
36 Como los hombres de Esdrín estaban extenuados por haber combatido durante mucho tiempo, Judas rogó al Señor que se manifestara como su aliado y su guía en el combate.36 No entanto, as tropas de Esdrin, que combatiam há muito tempo, achavam-se fatigadas; então Judas suplicou ao Senhor que se mostrasse seu aliado e os guiasse no combate.
37 Y entonando en la lengua de sus padres un himno de guerra, cayó sorpresivamente sobre los hombres de Gorgias y los derrotó.37 E, começando a entoar cantos na língua pátria e lançando o grito de guerra, atirou-se inopinadamente sobre os soldados de Górgias e os pôs em fuga.
38 Luego Judas reunió al ejército y se dirigió hacia la ciudad de Odolam. Como estaba ya próximo el séptimo día de la semana, se purificaron con los ritos de costumbre y celebraron el sábado en aquel lugar.38 Quando havia reunido seu exército, Judas alcançou a cidade de Odolão e, chegando o sétimo dia da semana, purificaram-se segundo o costume e celebraram ali o sábado.
39 Los hombres de Judas fueron al día siguiente –dado que el tiempo urgía– a recoger los cadáveres de los caídos para sepultarlos con sus parientes, en los sepulcros familiares.39 No dia seguinte, Judas e seus companheiros foram tirar os corpos dos mortos, como era necessário, para depô-los na sepultura ao lado de seus pais.
40 Entonces encontraron debajo de las túnicas de cada uno de los muertos objetos consagrados a los ídolos de Iamnia, que la Ley prohíbe tener a los judíos. Así se puso en evidencia para todos que esa era la causa por la que habían caído.40 Ora, sob a túnica de cada um encontraram objetos consagrados aos ídolos de Jânia, proibidos aos judeus pela lei: todos, pois, reconheceram que fora esta a causa de sua morte.
41 Todos bendijeron el proceder del Señor, el justo Juez, que pone de manifiesto las cosas ocultas,41 Bendisseram, pois, a mão do justo juiz, o Senhor, que faz aparecer as coisas ocultas,
42 e hicieron rogativas pidiendo que el pecado cometido quedara completamente borrado. El noble Judas exhortó a la multitud a que se abstuvieran del pecado, ya que ellos habían visto con sus propios ojos lo que había sucedido a los caídos en el combate a causa de su pecado.42 e puseram-se em oração, para implorar-lhe o perdão completo do pecado cometido. O nobre Judas falou à multidão, exortando-a a evitar qualquer transgressão, ao ver diante dos olhos o mal que havia sucedido aos que foram mortos por causa dos pecados.
43 Y después de haber recolectado entre sus hombres unas dos mil dracmas, las envió a Jerusalén para que se ofreciera un sacrificio por el pecado. El realizó este hermoso y noble gesto con el pensamiento puesto en la resurrección,43 Em seguida, fez uma coleta, enviando a Jerusalém cerca de dez mil dracmas, para que se oferecesse um sacrifício pelos pecados: belo e santo modo de agir, decorrente de sua crença na ressurreição,
44 porque si no hubiera esperado que los caídos en la batalla iban a resucitar, habría sido inútil y superfluo orar por los difuntos.44 porque, se ele não julgasse que os mortos ressuscitariam, teria sido vão e supérfluo rezar por eles.
45 Además, él tenía presente la magnífica recompensa que está reservada a los que mueren piadosamente, y este es un pensamiento santo y piadoso. Por eso, mandó ofrecer el sacrificio de expiación por los muertos, para que fueran librados de sus pecados.45 Mas, se ele acreditava que uma bela recompensa aguarda os que morrem piedosamente,
46 era esse um bom e religioso pensamento; eis por que ele pediu um sacrifício expiatório para que os mortos fossem livres de suas faltas.