Scrutatio

Venerdi, 17 maggio 2024 - San Pasquale Baylon ( Letture di oggi)

Vangelo secondo Luca 8


font
BIBBIA RICCIOTTIEL LIBRO DEL PUEBLO DE DIOS
1 - In seguito Gesù andava per città e per villaggi, predicando e annunziando il regno di Dio,1 Después, Jesús recorría las ciudades y los pueblos, predicando y anunciando la Buena Noticia del Reino de Dios. Lo acompañaban los Doce
2 ed erano con lui i Dodici e alcune donne, liberate da spiriti maligni e da infermità, cioè Maria, detta la Maddalena, dalla quale erano usciti sette demoni,2 y también algunas mujeres que habían sido curadas de malos espíritus y enfermedades: María, llamada Magdalena, de la que habían salido siete demonios;
3 e Giovanna, moglie di Cusa, procuratore di Erode, e Susanna e molte altre che l'assistevano con le loro sostanze.3 Juana, esposa de Cusa, intendente de Herodes, Susana y muchas otras, que los ayudaban con sus bienes.
4 Essendosi radunata una grande moltitudine e accorsa gente da ogni città, egli disse questa parabola:4 Como se reunía una gran multitud y acudía a Jesús gente de todas las ciudades, él les dijo, valiéndose de una parábola:
5 «Il seminatore uscì a seminare la sua semente; e, mentre seminava,5 «El sembrador salió a sembrar su semilla. Al sembrar, una parte de la semilla cayó al borde del camino, donde fue pisoteada y se la comieron los pájaros del cielo.
6 una parte del seme cadde lungo la strada; essa venne calpestata e gli uccelli del cielo la beccarono;6 Otra parte cayó sobre las piedras y, al brotar, se secó por falta de humedad.
7 una parte cadde sulla roccia; e appena nata, seccò, perchè non aveva umore; un'altra parte cadde tra le spine; e le spine cresciute insieme, la soffocarono;7 Otra cayó entre las espinas, y estas, brotando al mismo tiempo, la ahogaron.
8 il resto poi cadde su buon terreno e, cresciuto, fruttò il cento per uno». Detto questo, esclamò: «Chi ha orecchi da intendere, intenda».8 Otra parte cayó en tierra fértil, brotó y produjo fruto al ciento por uno». Y una vez que dijo esto, exclamó: «¡El que tenga oídos para oír, que oiga!».
9 I suoi discepoli gli domandarono che mai volesse significare la parabola.9 Sus discípulos le preguntaron qué significaba esta parábola,
10 Ed egli rispose loro: «A voi è concesso di conoscere i misteri del regno di Dio; ma agli altri se ne parla in parabole, affinchè guardando, non vedano e, ascoltando, non intendano.10 y Jesús les dijo: «A ustedes se les ha concedido conocer los misterios del Reino de Dios; a los demás, en cambio, se les habla en parábolas, para que miren sin ver y oigan sin comprender.
11 Or ecco quel che significa la parabola: la semente è la parola di Dio.11 La parábola quiere decir esto: La semilla es la Palabra de Dios.
12 Quelli che sono lungo la strada, sono coloro che ascoltano, ma poi viene il diavolo e porta via la parola dal loro cuore, affinchè non credano e non siano salvati.12 Los que están al borde del camino son los que escuchan, pero luego viene el demonio y arrebata la Palabra de sus corazones, para que no crean y se salven.
13 Quelli poi sulla pietra son coloro i quali, udita la parola, la ricevono con gioia; ma non hanno radice, credono per breve tempo e al momento della tentazione si tirano indietro.13 Los que están sobre las piedras son los que reciben la Palabra con alegría, apenas la oyen; pero no tienen raíces: creen por un tiempo, y en el momento de la tentación se vuelven atrás.
14 Semente caduta tra le spine, son coloro che hanno ascoltato, ma poi a poco a poco si lasciano soffocare dalle preoccupazioni, dalle ricchezze e dai piaceri della vita e non arrivano a maturità.14 Lo que cayó entre espinas son los que escuchan, pero con las preocupaciones, las riquezas y los placeres de la vida, se van dejando ahogar poco a poco, y no llegan a madurar.
15 Infine quella caduta in buon terreno sono coloro, che avendo udita la parola con cuore buono e perfetto la conservano e portano frutto con la perseveranza.15 Lo que cayó en tierra fértil son los que escuchan la Palabra con un corazón bien dispuesto, la retienen, y dan fruto gracias a sus constancia.
16 Non c'è nessuno che dopo aver accesa la lucerna, la ricuopra con un vaso o la metta sotto il letto; ma la mette sopra il candeliere, perchè chi entra veda la luce.16 No se enciende una lámpara para cubrirla con un recipiente o para ponerla debajo de la cama, sino que se la coloca sobre un candelero, para que los que entren vean la luz.
17 Perchè non v'è nulla di nascosto, che non si debba manifestare e nulla di segreto che non debba risapersi e non venga messo in luce.17 Porque no hay nada oculto que no se descubra algún día, ni nada secreto que no deba ser conocido y divulgado.
18 Badate dunque come ascoltate, perchè a chi ha, sarà dato e a chi non ha sarà tolto anche quel poco che pensa di avere».18 Presten atención y oigan bien, porque al que tiene, se le dará, pero al que no tiene, se le quitará hasta lo que cree tener».
19 La madre e i fratelli di Gesù vennero a trovarlo, ma non poterono avvicinarsi a lui per la folla.19 Su madre y sus hermanos fueron a verlo, pero no pudieron acercarse a causa de la multitud.
20 E gli fu riferito: «Tua madre e i tuoi fratelli son qui fuori che han voglia di vederti».20 Entonces le anunciaron a Jesús: «Tu madre y tus hermanos están ahí afuera y quieren verte».
21 Ed egli rispose loro: «Mia madre e i miei fratelli son coloro che ascoltano la parola di Dio e la mettono in pratica».21 Pero él les respondió: «Mi madre y mis hermanos son los que escuchan la Palabra de Dios y la practican».
22 Un giorno montò in una barca co' suoi discepoli e disse loro: «Passiamo all'altra riva del lago». E presero il largo.22 Un día, Jesús subió con sus discípulos a una barca y les dijo: «Pasemos a la otra orilla del lago». Ellos partieron,
23 Mentre navigavano, egli si addormentò e un turbine di vento si scatenò sul lago, sicchè la barca si riempiva d'acqua ed essi erano in pericolo.23 y mientras navegaban, Jesús se durmió. Entonces se desencadenó sobre el lago un fuerte vendaval; la barca se iba llenando de agua, y ellos corrían peligro.
24 Accostatisi a lui, lo svegliarono dicendo: «Maestro, siam perduti!». Ed egli alzatosi, comandò al vento e ai flutti; i quali s'acquetarono e si fece bonaccia.24 Los discípulos se acercaron y lo despertaron, diciendo: «¡Maestro, Maestro, nos hundimos!». El se despertó e increpó al viento y a las olas; estas se apaciguaron y sobrevino la calma.
25 Poi disse loro: «Dov'è la vostra fede?». E quelli, impauriti e meravigliati, dicevano l'un l'altro: «Chi è mai costui che comanda ai vènti e al mare, e gli ubbidiscono?».25 Después les dijo: «¿Dónde está la fe de ustedes?». Y ellos, llenos de temor y admiración, se decían unos a otros: «¿Quién es este que ordena incluso al viento y a las olas, y le obedecen?».
26 Tragittarono poi nel paese dei Geraseni, che è di rimpetto alla Galilea.26 Después llegaron a la región de los gerasenos, que está situada frente a Galilea.
27 Quando discese a terra, gli si fece incontro un uomo, che da gran tempo era posseduto dal demonio e non indossava vestito e non abitava in case, ma stava nei sepolcri.27 Jesús acababa de desembarcar, cuando salió a su encuentro un hombre de la ciudad, que estaba endemoniado. Desde hacía mucho tiempo no se vestía, y no vivía en una casa, sino en los sepulcros.
28 Appena vide Gesù, gettò un grido e dopo esserglisi prostrato dinanzi disse a voce alta: «Che v'è tra me e te, Gesù, Figliuolo dell'altissimo Iddio? Ti supplico di non tormentarmi».28 Al ver a Jesús, comenzó a gritar, cayó a sus pies y dijo con voz potente: «¿Qué quieres de mí, Jesús, Hijo de Dios, el Altísimo? Te ruego que no me atormentes».
29 Infatti egli comandava allo spirito immondo d'uscire da quell'uomo, giacchè da molto tempo si era impossessato di lui, e, benchè lo si fosse legato con catene e custodito in ceppi, aveva spezzato i legami ed era spinto dal demonio nel deserto.29 Jesús, en efecto, estaba ordenando al espíritu impuro que saliera de aquel hombre. Muchas veces el espíritu se había apoderado de él, y aunque lo ataban con cadenas y grillos para sujetarlo, él rompía sus ligaduras y el demonio lo arrastraba a lugares desiertos.
30 Allora Gesù lo interrogò, dicendo: «Che nome hai?». Egli rispose: «Legione», perchè molti demoni erano entrati in lui;30 Jesús le preguntó: «¿Cuál es tu nombre?». «Legión», respondió, porque eran muchos los demonios que habían entrado en él.,
31 ed essi lo pregavano che non comandasse loro d'andare nell'abisso.31 Y le suplicaban que no les ordenara precipitarse al abismo.
32 Ora essendoci lì presso a pascolare per la montagna una numerosa mandra di porci, lo pregarono che permettesse loro di entrare in quelli. Egli lo permise.32 Había allí una gran piara de cerdos que estaba paciendo en la montaña. Los demonios suplicaron a Jesús que les permitiera entrar en los cerdos. El se lo permitió.
33 Usciti adunque i demoni da quell'uomo, entrarono nei porci, e la mandra si scaraventò nel lago e annegò.33 Entonces salieron de aquel hombre, entraron en los cerdos, y desde lo alto del acantilado, la piara se precipitó al mar y se ahogó.
34 I mandriani, quando ebbero visto ciò, fuggirono a portarne la nuova in città e per le campagne.34 Al ver lo que había pasado, los cuidadores huyeron y difundieron la noticia en la ciudad y en los poblados.
35 Uscì la gente a vedere l'accaduto e arrivati da Gesù, trovarono l'uomo, dal quale erano usciti i demoni, vestito, seduto ai suoi piedi e in sè; e s'impaurirono.35 En seguida la gente fue a ver lo que había sucedido. Cuando llegaron adonde estaba Jesús, vieron sentado a sus pies, vestido y en sus sano juicio, al hombre del que habían salido los demonios, y se llenaron de temor.
36 E quelli che avevan vista la cosa raccontarono come l'ossesso era stato liberato.36 Los que habían presenciado el hecho les contaron cómo había sido curado el endemoniado.
37 Tutti gli abitanti del paese dei Geraseni lo pregarono di allontanarsi da loro perchè erano in preda a gran timore. Egli, montato in barca, se ne tornò indietro.37 Todos los gerasenos pidieron a Jesús que se alejará de allí, porque estaban atemorizados; y él, subiendo a la barca, regresó.
38 L'uomo però dal quale erano usciti i demoni, lo pregava di poter stare con lui. Ma Gesù lo congedò dicendogli:38 El hombre del que salieron los demonios le rogaba que lo llevara con él, pero Jesús lo despidió, diciéndole:
39 «Torna a casa tua e racconta quanto ha fatto Dio per te». E quello se ne andò per tutta la città raccontando a tutti le grandi cose che Gesù aveva fatto per lui.39 «Vuelve a tu casa y cuenta todo lo que Dios has hecho por ti». El se fue y proclamó en toda la ciudad lo que Jesús había hecho por él.
40 Gesù, al suo ritorno, fu accolto dalla folla che stava ad aspettarlo.40 A su regreso, Jesús fue recibido por la multitud, porque todos lo estaban esperando.
41 Quand'ecco un uomo, chiamato Giairo, capo della sinagoga, venne a gettarsi ai piedi di Gesù, supplicandolo d'andare a casa sua,41 De pronto, se presentó un hombre llamado Jairo, que era jefe de la sinagoga, y cayendo a los pies de Jesús, le suplicó que fuera a su casa,
42 perchè aveva una figliuola unica di dodici anni, che stava per morire. Mentre Gesù vi s'avviava ed era pigiato dalla folla,42 porque su única hija, que tenía unos doce años, se estaba muriendo. Mientras iba, la multitud lo apretaba hasta sofocarlo.
43 una donna, che da dodici anni pativa perdite di sangue e aveva spesa nei dottori tutta la sua sostanza, senza poter esser guarita da nessuno,43 Una mujer que padecía de hemorragias desde hacía doce años y a quien nadie había podido curar,
44 gli s'accostò di dietro e toccò l'orlo della sua veste; e in quell'istante il suo flusso si ristagnò.44 se acercó por detrás y tocó los flecos de su manto; inmediatamente cesó la hemorragia.
45 Domandò Gesù: «Chi mi ha toccato?». E poichè negavano tutti, Pietro e i suoi compagni gli osservarono: «Maestro, la gente ti si stringe d'attorno e ti pigia e tu domandi: - Chi mi ha toccato? -».45 Jesús preguntó: «¿Quién me ha tocado?». Como todos lo negaban, Pedro y sus compañeros le dijeron: «Maestro, es la multitud que te está apretujando».
46 Gesù replicò: «Qualcuno mi ha toccato, perchè ho sentito che una forza è uscita da me».46 Pero Jesús respondió: «Alguien me ha tocado, porque he sentido que una fuerza salía de mí».
47 Allora la donna, vedendo che non era rimasta inosservata, andò tremante a gettarglisi ai piedi e dichiarò, alla presenza di tutto il popolo, per qual motivo l'aveva toccato e come in un istante era stata guarita.47 Al verse descubierta, la mujer se acercó temblando, y echándose a sus pies, contó delante de todos por qué lo había tocado y cómo fue curada instantáneamente.
48 Ed egli le disse: «Figlia, la tua fede ti ha salvata, va' in pace».48 Jesús le dijo entonces: «Hija, tu fe te ha salvado, vete en paz».
49 Mentr'egli parlava ancora, venne uno a dire al capo della sinagoga: «La tua figliuola è morta; non incomodare più oltre il Maestro».49 Todavía estaba hablando, cuando llegó alguien de la casa del jefe de sinagoga y le dijo: «Tu hija ha muerto, no molestes más al Maestro».
50 Ma Gesù udito ciò, gli replicò: «Non temere; solo abbi fede ed ella sarà salva».50 Pero Jesús, que había oído, respondió: «No temas, basta que creas y se salvará».
51 Giunti alla casa non lasciò entrare nessuno con sè, tranne Pietro e Giovanni, unitamente al padre e alla madre della fanciulla.51 Cuando llegó a la casa no permitió que nadie entrara con él, sino Pedro, Juan y Santiago, junto con el padre y la madre de la niña.
52 Tutti piangevano e si lamentavano per lei. Ma egli disse: «Non piangete; ella non è morta, ma dorme».52 Todos lloraban y se lamentaban. «No lloren, dijo Jesús, no está muerta, sino que duerme».
53 E si facevano beffe di lui, sapendo che era morta.53 Y se burlaban de él, porque sabían que la niña estaba muerta.
54 Ma egli, presala per la mano, disse ad alta voce: «Fanciulla, alzati!».54 Pero Jesús la tomó de la mano y la llamó, diciendo: «Niña, levántate».
55 E tornò lo spirito di lei ed ella si levò subito; e Gesù comandò che le si desse da mangiare.55 Ella recuperó el aliento y se levantó en el acto. Después Jesús ordenó que le dieran de comer.
56 E i genitori di lei si sbigottirono; ma egli comandò loro di non dire a nessuno quel che era avvenuto.56 Sus padres se quedaron asombrados, pero él les prohibió contar lo que había sucedido.