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Giovedi, 16 maggio 2024 - San Simone Stock ( Letture di oggi)

Salmos 28


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EL LIBRO DEL PUEBLO DE DIOSBIBLIA
1 De David.

Yo te invoco, Señor;

tú eres mi Roca, no te quedes callado,

porque si no me respondes,

seré como los que bajan al sepulcro.

1 De David.
Hacia ti clamo, Yahveh,
roca mía, no estés mudo ante mí;
no sea yo, ante tu silencio,
igual que los que bajan a la fosa.
2 Oye la voz de mi plegaria,

cuando clamo hacia ti,

cuando elevo mis manos hacia tu Santuario.

2 Oye la voz de mis plegarias,
cuando grito hacia ti,
cuando elevo mis manos, oh Yahveh,
al santuario de tu santidad.
3 No me arrastres con los malvados

ni con los que hacen el mal:

con los que hablan de paz a su prójimo,

mientras su corazón está lleno de maldad.

3 No me arrebates con los impíos,
ni con los agentes de mal,
que hablan de paz a su vecino,
mas la maldad está en su corazón.
4 Trátalos conforme a sus acciones,

como corresponde a su mala conducta;

trátalos según la obra de sus manos,

págales su merecido.

4 Dales, Yahveh, conforme a sus acciones,
y a la malicia de sus hechos,
según la obra de sus manos trátales,
págales con su misma moneda.
5 Ellos no valoran lo que hace el Señor

ni la obra de sus manos:

por eso él los derribará

y no volverá a edificarlos.

5 Pues no comprenden los hechos de Yahveh,
la obra de sus manos:
¡derríbelos él y no los rehabilite!
6 Bendito sea el Señor,

porque oyó la voz de mi plegaria;

6 ¡Bendito sea Yahveh, que ha oído
la voz de mis plegarias!
7 el Señor es mi fuerza y mi escudo,

mi corazón confía en él.

Mi corazón se alegra porque recibí su ayuda:

por eso le daré gracias con mi canto.

7 Yahveh mi fuerza, escudo mío,
en él confió mi corazón y he recibido ayuda:
mi carne de nuevo ha florecido,
le doy gracias de todo corazón.
8 El Señor es la fuerza de su pueblo,

el baluarte de salvación para su Ungido.

8 Yahveh, fuerza de su pueblo,
fortaleza de salvación para su ungido.
9 Salva a tu pueblo y bendice a tu herencia;

apaciéntalos y sé su guía para siempre.
9 Salva a tu pueblo, bendice a tu heredad,
pastoréalos y llévalos por siempre.