Scrutatio

Mercoledi, 15 maggio 2024 - Sant'Isidoro agricoltore ( Letture di oggi)

Hechos de los Apóstoles 21


font
EL LIBRO DEL PUEBLO DE DIOSSAGRADA BIBLIA
1 Después de separarnos de ellos, nos embarcamos y fuimos derecho a Cos; al día siguiente, llegamos a Rodas y de allí pasamos a Pátara.1 Depois de nos separarmos dele, embarcamos e fomos em direção a Cós, e no dia seguinte a Rodes e dali a Pátara.
2 Como encontramos un barco que iba a Fenicia, subimos a bordo y partimos.2 Encontramos aí um navio que ia partir para a Fenícia. Entramos e seguimos viagem.
3 Avistamos la isla de Chipre y, dejándola a nuestra izquierda, seguimos navegando en dirección a Siria, hasta que por fin, atracamos en el puerto de Tiro, donde el barco debía descargar.3 Quando estávamos à vista de Chipre, deixando-a à esquerda, continuamos rumo à Síria e aportamos em Tiro, onde o navio devia ser descarregado.
4 Allí encontramos a algunos discípulos y permanecimos una semana con ellos. Estos, iluminados por el Espíritu, aconsejaban a Pablo que no subiera a Jerusalén,4 Como achássemos uns discípulos, detivemo-nos com eles por sete dias. Eles, sob a inspiração do Espírito, aconselhavam Paulo que não subisse a Jerusalém.
5 pero llegado el momento de partir, proseguimos nuestro viaje. Todos nos acompañaron hasta las afueras de la ciudad, incluso las mujeres y los niños. En la playa nos arrodillamos para orar,5 Mas, passados que foram esses dias, partimos e seguimos a nossa viagem. Todos eles com suas mulheres e filhos acompanharam-nos até fora da cidade. Ajoelhados na praia, fizemos a nossa oração.
6 y habiéndonos despedido, nosotros subimos al barco y ellos se volvieron a sus casas.6 Despedimo-nos então e embarcamos, enquanto eles voltaram para suas casas.
7 De Tiro fuimos a Tolemaida, poniendo así término a la travesía. Allí saludamos a los hermanos y nos detuvimos un día con ellos.7 Navegando, fomos de Tiro a Ptolemaida, onde saudamos os irmãos, passando um dia com eles.
8 Al día siguiente, volvimos a partir y llegamos a Cesarea, donde fuimos a ver a Felipe, el predicador del evangelio, unos de los Siete, y nos alojamos en su casa.8 Partindo no dia seguinte, chegamos a Cesaréia e, entrando na casa de Filipe, o Evangelista, que era um dos sete {diáconos}, ficamos com ele.
9 El tenía cuatro hijas solteras que profetizaban.9 Tinha quatro filhas virgens que profetizavam.
10 Permanecimos allí muchos días, y durante nuestra estadía, bajó de Judea un profeta llamado Agabo.10 Já estávamos aí fazia alguns dias, quando chegou da Judéia um profeta, chamado Ágabo.
11 Este vino a vernos, tomó el cinturón de Pablo, se ató con él los pies y las manos, y dijo: «El Espíritu Santo dice: Así atarán los judíos en Jerusalén al dueño de este cinturón y lo entregarán a los paganos».11 Veio ter conosco, tomou o cinto de Paulo e, amarrando-se com ele pés e mãos, disse: Isto diz o Espírito Santo: assim os judeus em Jerusalém ligarão o homem a quem pertence este cinto e o entregarão às mãos dos pagãos.
12 Al oír estas palabras, los hermanos del lugar y nosotros mismos rogamos a Pablo que no subiera a Jerusalén.12 A estas palavras, nós e os fiéis que eram daquele lugar, rogamos-lhe que não subisse a Jerusalém.
13 Pablo respondió: «¿Por qué lloran así y destrozan mi corazón? Yo estoy dispuesto, no solamente a dejarme encadenar, sino también a morir en Jerusalén por el nombre del Señor Jesús».13 Paulo, porém, respondeu: Por que chorais e me magoais o coração? Pois eu estou pronto não só a ser preso, mas também a morrer em Jerusalém pelo nome do Senhor Jesus.
14 Y como no conseguíamos persuadirlo, no insistimos más y dijimos: «Que se haga la voluntad del Señor».14 Como não pudéssemos persuadi-lo, desistimos, dizendo: Faça-se a vontade do Senhor!
15 Algunos días después, terminados nuestros preparativos, subimos a Jerusalén.15 Depois desses dias, terminados os preparativos, subimos a Jerusalém.
16 Iban con nosotros algunos discípulos de Cesarea, que nos hicieron alojar en casa de un tal Mnasón de Chipre, un discípulo de la primera hora.16 Foram também conosco alguns dos discípulos de Cesaréia, que nos levaram à casa de Menason de Chipre, um antigo discípulo em cuja casa nos devíamos hospedar.
17 Cuando llegamos a Jerusalén, los hermanos nos recibieron con alegría.17 À nossa chegada em Jerusalém, os irmãos nos receberam com alegria.
18 Al día siguiente, Pablo fue con nosotros a casa de Santiago, donde también se reunieron todos los presbíteros.18 No dia seguinte, Paulo dirigiu-se conosco à casa de Tiago, onde todos os anciãos se reuniram.
19 Después de saludarlos, Pablo expuso detalladamente todo lo que Dios había hecho entre los paganos a través de su ministerio.19 Tendo-os saudado, contou-lhes uma por uma todas as coisas que Deus fizera entre os pagãos por seu ministério.
20 Ellos alabaron a Dios por lo que acababan de oír, pero le advirtieron: «Tú sabes, hermano, que millares de judíos han abrazado la fe, y que todos ellos son celosos cumplidores de la Ley.20 Ouvindo isso, glorificaram a Deus e disseram a Paulo: Bem vês, irmão, quantos milhares de judeus abraçaram a fé sem abandonar seu zelo pela lei.
21 Ahora bien, ellos han oído decir que con tus enseñanzas apartas de Moisés a todos los judíos que viven entre los paganos, diciéndoles que no circunciden a sus hijos y no sigan más sus costumbres.21 Eles têm ouvido dizer de ti que ensinas os judeus, que vivem entre os gentios, a deixarem Moisés, dizendo que não devem circuncidar os seus filhos nem observar os costumes {mosaicos}.
22 ¿Qué haremos entonces? Pronto seguramente se van a enterar de tu llegada.22 Que se há de fazer? Sem dúvida, saberão de tua chegada.
23 Tienes que hacer lo que te vamos a decir: Aquí tenemos a cuatro hombres que están obligados por un voto:23 Faze, pois, o que te vamos dizer. Temos aqui quatro homens que têm um voto.
24 llévalos contigo, purifícate con ellos y paga lo que corresponde para que se hagan cortar el cabello. Así todo el mundo sabrá que no es verdad lo que han oído acerca de ti, sino que tú también eres un fiel cumplidor de la Ley.24 Toma-os contigo, faze com eles os ritos da purificação e paga por eles {a oferta obrigatória} para que rapem a cabeça. Então todos saberão que é falso quanto de ti ouviram, mas que também tu guardas a lei.
25 En cuanto a los paganos que abrazaron la fe, les hemos enviado nuestras decisiones, a saber: que se abstengan de la carne inmolada a los ídolos, de la sangre, de la carne de animales muertos sin desangrar y de las uniones ilegales».25 Mas a respeito dos que creram dentre os gentios, já escrevemos, ordenando que se abstenham do que for sacrificado aos ídolos, do sangue, da carne sufocada e da fornicação.
26 Al día siguiente, Pablo tomó consigo a esos hombres, se purificó con ellos y entró en el Templo. Allí hizo saber cuándo concluiría el plazo fijado para la purificación, es decir, cuándo debía ofrecerse la oblación por cada uno de ellos.26 Então Paulo acompanhou aqueles homens no dia seguinte e, purificando-se com eles, entrou no templo e fez aí uma declaração do termo do voto, findo o qual se devia oferecer um sacrifício a favor de cada um deles.
27 Casi al final de los siete días, cuando los judíos venidos de Asia vieron a Pablo en el Templo, amotinaron a la multitud y se apoderaron de él,27 Ao fim dos sete dias, os judeus, vindos da Ásia, viram Paulo no templo e amotinaram todo o povo. Lançando-lhe as mãos,
28 gritando: «¡Socorro, israelitas! Este es el hombre que predica a todos y en todas partes contra nuestro pueblo, contra la Ley y contra este Templo, y ahora ha llegado a introducir en él a los paganos, profanando este lugar santo».28 gritavam: Ó judeus, valei-nos! Este é o homem que por toda parte prega a todos contra o povo, a lei e o templo. Além disso, introduziu até gregos no templo e profanou o lugar santo.
29 Decían esto porque antes habían visto con él en la ciudad a Trófimo de Efeso, y creían que Pablo lo había introducido en el Templo.29 É que tinham visto Trófimo, de Éfeso, com ele na cidade, e pensavam que Paulo o tivesse introduzido no templo.
30 La ciudad entera se alborotó, y de todas partes acudió el pueblo. Se apoderaron de Pablo, lo sacaron fuer del Templo y cerraron inmediatamente las puertas.30 Alvoroçou-se toda a cidade com grande ajuntamento de povo. Agarraram Paulo e arrastaram-no para fora do templo, cujas portas se fecharam imediatamente.
31 Ya iban a matarlo, cuando llegó al tribunal de la cohorte la noticia de que toda Jerusalén estaba convulsionada.31 Como quisessem matá-lo, o tribuno da coorte foi avisado de que toda Jerusalém estava amotinada.
32 En seguida el tribuno, con unos soldados y centuriones, se precipitó sobre los manifestantes. Al ver al tribuno y a los soldados, dejaron de golpear a Pablo.32 Ele tomou logo soldados e oficiais e correu aos manifestantes. Estes, ao avistarem o tribuno e os saldados, cessaram de espancar Paulo.
33 El tribuno se acercó, tomó a Pablo y mandó que lo ataran con dos cadenas; después preguntó quién era y qué había hecho.33 Aproximando-se então o tribuno, prendeu-o e mandou acorrentá-lo com duas cadeias. Perguntou então quem era e o que havia feito.
34 Todos gritaban al mismo tiempo, y a causa de la confusión, no pudo sacar nada en limpio. Por eso hizo conducir a Pablo a la fortaleza.34 Na multidão todos gritavam de tal modo que, não podendo apurar a verdade por causa do tumulto, mandou que fosse recolhido à cidadela.
35 Al llegar a la escalinata, los soldados tuvieron que alzarlo debido a la violencia de la multitud,35 Quando Paulo chegou às escadas, foi carregado pelos soldados, por causa do furor da multidão.
36 porque el pueblo en masa lo seguía, gritando: «¡Que lo maten!».36 O povo o seguia em massa dizendo aos gritos: À morte
37 Cuando lo iban a introducir en la fortaleza, Pablo dijo al tribuno: «¿Puedo decirte una palabra?». «¿Tú sabes griego?», le preguntó el tribuno.37 Quando estava para ser introduzido na fortaleza, Paulo perguntou ao tribuno: É-me permitido dizer duas palavras? Este respondeu: Sabes o grego!
38 Entonces, ¿no eres el egipcio que hace unos días provocó un motín y llevó al desierto a cuatro mil terroristas?».38 Não és tu, portanto, aquele egípcio que há tempos levantou um tumulto e conduziu ao deserto quatro mil extremistas?
39 «Yo soy judío, dijo Pablo, originario de Tarso, ciudadano de una importante ciudad de Cilicia. Te ruego que me permitas hablar al pueblo».39 Paulo replicou: Eu sou judeu, natural de Tarso, na Cilícia, cidadão dessa ilustre cidade. Mas rogo-te que me permitas falar ao povo.
40 El trino se lo permitió, y Pablo, de pie sobre la escalinata, hizo una señal al pueblo con la mano. Se produjo un gran silencio, y Pablo comenzó a hablarles en hebreo.40 O tribuno lho permitiu. Paulo, em pé nos degraus, acenou ao povo com a mão e se fez um grande silêncio. Falou em língua hebraica do seguinte modo: